JULIÁN GARCÍA Y LEONIDAS GUERRERO
LA PATRIA | PALESTINA Y RIOSUCIO

Líderes y habitantes del corregimiento de Arauca (Palestina) y del municipio de Riosucio acudieron a las audiencias públicas ciudadanas que la Procuraduría Regional de Caldas desarrolla por el departamento.
En estos encuentros las comunidades pueden denunciar anomalías, y de paso, hablar con el titular de este organismo,  Carlos Alberto Castañeda, o con delegados de este despacho.
Las quejas las trasladan a un comité, para mirar si la entidad debe tomar acciones preventivas o disciplinarias.

En Arauca

La reunión fue en el auditorio del colegio La Sagrada Familia, de Palestina, donde le contaron al procurador los problemas de inseguridad, el caos vehicular y la falta de escenarios deportivos y de un hospital adecuado.
La alcaldesa de Palestina, Beatriz Elena Gil Garavito, respondió a algunas inquietudes. "Estoy trabajando en la creación del Hospital Departamental La Divina Misericordia y en la construcción de una cancha y un patinódromo para Arauca. Solicitaré además, el  acompañamiento de un agente de tránsito para el corregimiento".
Gil también anunció que los yips de servicio público que se están estacionando en el  parque serán trasladados al sector los talleres; piensa contratar una interventoría para el servicio de alumbrado público, cuyo contrato está firmado a 15 años, y que busca renegociar las deudas que en impuestos tienen con el Municipio los vendedores estacionarios que se ubican por el parque.
Durante esta audiencia hubo un espacio para capacitación en Conciliación prejudicial y prevención del daño antijurídico, dirigida a funcionarios públicos de Palestina.

En Riosucio

Foto | Leonidas Guerrero | LA PATRIA
Agradecidos quedaron comerciantes, campesinos, delegados de juntas de Acción Comunal y ciudadanos por la audiencia que tuvo lugar en la Cámara de Comercio. Formularon inquietudes sobre el tema indígena, pues los que se consideran campesinos piden respeto por la escritura pública, ya que tienen sus propiedades en territorio indígena. Cuentan que en el Resguardo La Montaña le quemaron la casa a una familia que no se considera indígena y tiene escrituras.
También pidieron respeto al derecho a la libre movilización por cualquier vereda, sin tener que pedirle permiso a nadie, pues el municipio es de todos. Las voces se alzaron cuando los indígenas Kumbas  reclamaron sus derechos y respeto por los procesos que adelantan por su reconocimiento.
El alcalde, Bernardo Arley  Hernández, manifestó que solo cumple lo que el Gobierno establece y que es el que deberá definir la situación de Riosucio.
La personera, Edith Pescador, invitó a quienes no quieren ser o no se consideren indígenas a que definan su situación. Pueden desafiliarse de un resguardo cuando quieran y seguirán recibiendo los beneficios del Gobierno, puntualizó.
Se solicitó que este problema lo trate la Procuraduría General de la Nación. El delegado de la Procuraduría Regional invitó a que los pobladores hagan llegar las quejas y reclamos como un derecho ciudadano.
"Al alcalde se le olvida que es el alcalde de todos los riosuceños, no solo de los indígenas, a los que defiende siempre", agregó otro asistente. Una preocupaciones más de la gente es que al censarse como indígenas sus propiedades pasan a un colectivo.