JUAN CARLOS LAYTON

LA PATRIA | MANIZALES

¿Cómo empiezan el año Manizales y Caldas?

Si se trata de medirle la temperatura a la ciudad por el impacto social y económico que se registró en el 2020, para algunos empresarios y analistas hay que ser sinceros en que hay muchos retos por superar, en especial en el campo laboral, reducción de la informalidad y atención médica.

Si se mira el clima empresarial, el ambiente es diferente. A pesar del fuerte impacto de la crisis económica por la pandemia, el efecto fue bajo. El número de empresas creadas se redujo apenas en el 5% frente al 2019 y las cancelaciones cayeron en el 13,4%, lo que indica que el tejido empresarial pudo resistir en términos globales estos meses de pandemia.

Esto, sin dejar de reconocer que hay empresas de servicio y comercio afectadas, como los restaurantes, sitios de eventos, bares y cantinas y oferta cultural que aún no han podido tener una senda de recuperación sólida.

Exportaciones, arriba

Los indicadores del DANE y de la Cámara de Comercio evidencian que la región aumentó sus exportaciones, jalonadas principalmente por el café y sus derivados.

Aunque Manizales es la quinta ciudad del país con mayor costo de vida, según algunos analistas en parte esto demuestra que pese a la covid-19 hubo un movimiento de la demanda y cierto impulso económico, ya que en otras regiones el freno en el costo de vida fue directamente proporcional a la reducción de la economía, el cierre de empresas y el bajo poder adquisitivo.

También se destaca que el Índice de Competitividad de Ciudades (ICC), entregado el Consejo Privado de Competitividad (CPC) y la Universidad del Rosario, mantuvo el área metropolotiana de Manizales y Villamaría entre las tres regiones más competitivas de Colombia, después de Bogotá y Medellín, reflejo del trabajo articulado entre los sectores público, productivo y gremios económicos.

El reto, de acuerdo con varios gremios, como la Andi, es que la ciudad y el departamento impulsen la economía con un mayor respaldo a la generación de obras públicas para jalonar el empleo. Por su parte, la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) pide mirar con juicio las cifras y no contentarse con algunos resultados, en medio de un panorama que sigue siendo complejo. A continuación algunos indicadores de lo bueno y lo malo con que se inicia el año en Manizales y Caldas.

Optimismo razonable

Lorenzo Calderon, presidente Comité Intergremial de Caldas

Veo el año con un optimismo razonable y creo que hay una dinámica potencial de crecimiento por sectores. Bajo ese entendido lo que viene es significativo, pero hay que tener claridad que la covid llegó para quedarse y que hay que convivir con ella. Hay sectores con niveles serios de vulnerabilidad y amenaza, los cuales hay que rodear y buscar alternativas para protegerlos e impedir al máximo que se cierren y se pierdan empleos. En este momento el Estado es un protagonista fundamental, en la medida que impone las reglas y tiene un instrumento valiosísimo que es el presupuesto público para hacer gasto e inversión para generar empleos y oportunidades. Tenemos las condiciones para salir adelante y confío en que en Manizales aumentemos nuestra capacidad de compasión y solidaridad y cultura ciudadana, es el único presupuesto que determinará una normalización en todas las actividades.

Planes de estímulo

Juan Eduardo Zuluaga Perna, presidente Andi

El año se inicia con un proceso de recuperación con respecto a la crisis en la que estuvimos envueltos el primer semestre del 2020. Es de esperar que continúe en el 2021, pero es muy difícil que logremos mejorar los indicadores que se tenían antes de la pandemia porque existen sectores de la economía de servicios que están regresando de forma parcial, en algunos casos discontinua y sin un horizonte claro. Como esta circunstancia no va a cambiar debido a la gradualidad con la cual se van a recibir las vacunas es muy importante que continúen los programas de estímulos del Gobierno nacional y en nuestro caso que se dinamice el gasto público municipal a través de proyectos de infraestructura que generen empleo y competitividad del sector productivo. Esta crisis nos ha dejado como lección lo importante que es mantener un sector industrial fuerte, ya que la economía de servicios es muy sensible a este tipo de emergencias.

Panorama oscuro

Óscar Arturo Orozco Sánchez, presidente Sintraelecol Caldas y miembro Junta Nacional CUT

Las estadísticas van por un lado, pero las situaciones que tenemos que lidiar son diferentes. Muchas empresas no hacen el cierre de su actividad económica porque no tienen esa cultura, pero los negocios cerrados se multiplican por decenas. Seguimos sin entender la metodología del DANE y no entendemos cómo manejan esas cifras de desempleo, subempleo e informalidad, las estadísticas pueden ser mayores. Es solo la punta del iceberg. Hoy solo se genera empleo por las obras públicas, la construcción y los centros de contacto, pero no hay empresas que generen empleo con valor agregado y tampoco hay impulso agropecuario, excepto la producción de aguacate hass, que sigue contaminando las quebradas y generando impacto ambiental. El panorama para el 2021, entendiendo que no hay una fecha clara de vacunación y que los focos de infección se han mantenido en el mundo, nos presenta una situación oscura y compleja.

Hay resiliencia

Mateo Rivera Arbeláez, director Estudios Económicos y Competitividad Cámara de Comercio de Manizales

El indicador con el peor desempeño y en gran medida refleja la dimensión de la crisis actual es el mercado laboral. Si bien nuestra región contaba con un gran activo como la formalidad laboral, no deja de ser preocupante la situación de los informales y en el peor de los casos de aquellas personas que han perdido su sustento diario. En cuanto a la dinámica empresarial, es fundamental destacar la resiliencia y el alto grado de compromiso de los empresarios del departamento. Ellos son los que se han puesto al pie del cañón y han llevado la peor parte de esta crisis. Sin embargo, como lo muestran los datos de creaciones y cancelaciones de matrículas mercantiles, por el momento nuestro tejido empresarial ha podido soportar y en cierta manera salir adelante ante este panorama tan desafiante. Es importante remarcar el buen momento que vive la caficultura, actividad que ha jalonado las exportaciones de Caldas.