Supuestas estafadoras van para juicio

LA PATRIA | MANIZALES

Un cheque sin fondos por $30 millones tiene en la mira de las autoridades judiciales manizaleñas a dos mujeres que le huyen a la justicia. Las denuncias contra ellas van desde estafas hasta suplantación de identidad. Así adquirieron celulares, motocicletas, carros y hasta cirugías plásticas.

En Caldas, Risaralda, Quindío, Cundinamarca, Tolima, Caquetá y Vichada se tiene conocimiento de su actuar delincuencial, pero en el 2011, cuando se llevó a cabo un allanamiento en su vivienda en Dosquebradas, escaparon. La misma suerte no corrieron la madre y el padrastro de una de ellas, pues los capturaron.

Ellas, al parecer, engañaron a un médico cirujano en Manizales, en el 2009. Les practicó cirugías plásticas, luego le hicieron creer que el padre de una falleció y le pidieron dinero prestado. A cambio le entregaron el cheque de un talonario que días antes robaron de un carro que su propietario descuidó.

Ayer, en el Palacio de Justicia, durante la audiencia preparatoria que llevó a cabo el Juzgado Tercero Penal, tampoco llegaron. Pero con ellas o sin ellas el juicio se realizará en octubre. Tendrán que responder por concierto para delinquir en modalidad de estafa, hurto calificado y agravado y falsedad en documentos.

El fiscal expuso pruebas como los documentos que hallaron los investigadores en la vivienda de las señaladas, testimonios de víctimas en otros departamentos y quienes, de buena fe, les vendieron productos creyendo en las falsas identidades que presentaban.

Entre los afectados hay incluso una familiar, a quien le robaron los documentos personales en su propia casa en Caquetá y con ellos sacaron hasta motos. También otro médico cirujano en Ibagué, a quien le pagaron supuestamente con cheques sin fondos, luego de que las operó.

La reina

En julio pasado, integrantes de la Policía de Huila capturaron en Pitalito a María Argenis Almario, familiar de una de las sospechosas. El vehículo en el que se movilizaba aparecía reportado como hurtado en Mocoa (Putumayo).

Esta mujer estuvo en la cárcel y allá siguió estafando, pero esta vez a las reclusas. Cuando quisieron delatarlas, las amenazó.