Así se engancha el remolque a su vehículo

MARGARET SÁNCHEZ

LA PATRIA | MANIZALES

Práctico. Así describe Juan Carlos Mesa el remolque que le adecuó a su Toyota VXL desde hace un año para transportar la cuatrimoto y la moto de sus tres hijos.

El accesorio le permite llevar esos vehículos por un trayecto de 273 kilómetros, desde Manizales hasta Puerto Nare (Antioquia), donde viaja con Juan Esteban, de 16 años, y los mellizos Juan Martín y María Antonia, de 13 años, quienes practican motocross. “Les gusta trochar en la finca”, expresa.

El deportivo es un tipo de tráiler, también está el agrícola, para cargar heno, bultos, cerdos o caballos; o el multipropósito o utilitario, para movilizar vallas publicitarias, trasteos u otros elementos. 
Estos son, según el Código Nacional de Tránsito, pequeños remolques, a los que define como: “Vehículo no motorizado con capacidad hasta de una tonelada, halado por un automotor y dotado de su sistema de luces reflectivas y frenos”. 

Carlos Andrés Mideros, propietario del taller TC Mideros en el barrio Los Cedros, creado hace 28 años por su papá, Carlos Arturo, comenzó a adaptar remolques desde hace 12 años. “Soy amante de las motos, conocí amigos que necesitaban transportarlas, así que empecé a fabricar tiros de arrastre”.

Esa es la parte a la que se engancha el tráiler al vehículo, depende del carro se puede adecuar entre una y dos horas, la fabricación del remolque requiere más tiempo.

Estos detalles los explica Carlos Andrés, además de las medidas, pesos recomendados para automóviles y camionetas, y los cuidados que se deben tener.

Tiro de arrastre

Estructura puesta en la parte trasera del vehículo, en el bastidor o en el chasis, depende del carro. Se sujeta con tornillos. Este tiene un lingote o mano, cadenas de seguridad, guayas y una bola, que es la que se agarra al tráiler.

Para los automóviles se usa un tiro de arrastre de tubo redondo de acero al carbón, para las camionetas, uno cuadrado. 
La bola de enganche más usada es la 1 7/8. La de 2 pulgadas es para tiros de arrastre de hasta 3 toneladas.

Depende el carro 

Desde un Twingo hasta una Toyoya TXL, de superchasis, se puede adecuar un tiro de arrastre, explica Carlos Andrés Mideros, del taller TC Mideros. 

Lo que recomienda es verificar, primero, si el vehículo viene con los orificios para adecuarlo. Agrega que en los Renault y Volkswagen, los cubren con calcomanías. “Los carros nuevos traen en el catálogo la información de cuánto pueden arrastrar y traen hasta las roscas de agarre”.

Precisa que otras marcas traen el bastidor sin estos huecos, por lo que hay que modificarlos, algo que no recomienda y solo realiza con el consentimiento del propietario. “Es una desventaja, porque desvalora el vehículo”. 

Carlos Andrés indica que en un automóvil, como un Chevrolet Beat se puede instalar un tiro de arrastre para un remolque de unos 400 kilos, que puede cargar una cuatrimoto o dos motos de enduro, de 120 kilos cada una.

En el caso de camionetas, recuerda que a una Ford Raptor le adecuaron un planchón de 6 metros de largo para transportar dos cuatrimotos para dos personas, un peso de 3 mil 600 kilos.

Precios
El precio depende del proyecto, aclara Carlos Andrés Mideros. En promedio:
* $425 mil, tiro de arrastre. 
* $80 mil, instalación eléctrica. 
* $90 mil, rodamientos, si son para un remolque pequeño, llantas de Chevrolet Carry. $280 mil, llantas de cinco o seis pernos
* $1 millón 800 mil en adelante, el remolque. 

Medidas y peso 
Ancho: los guardabarros del remolque no deben sobrepasar el ancho del vehículo, de los espejos. 
Largo: debería ser dos veces el largo del carro. No exceder.
Peso: Se estima que el peso del remolque, incluyendo la carga, no debería superar la mitad del peso del carro al que se va a enganchar. Nunca lleve más de lo necesario. Intente aligerar al máximo la carga que lleva en el maletero del vehículo, para que la zona trasera no baje la altura. En el remolque, hay que intentar que el centro de gravedad quede justo delante de las ruedas del remolque.

Cuidados

“Como a los carros, parquearlo a la sombra, evitar que le caiga agua, cubrirlo con una carpa, limpiarlo y engrasarlo. Si no se cuidan y se mantienen en condiciones húmedas los rodamientos y las hojas de resorte se achacan y se dañan a los seis meses”, precisa Carlos Andrés Midero.

También aconseja revisar las luces, los amortiguadores y los rodamientos. Si se usan constantemente se pueden desgastar cada dos años. 

Por norma

Los pequeños remolques, según el Código Nacional de Tránsito, deben llevar placa, luces traseras de reversa, direccionales y stop; reflectivos en los laterales y banderines. No se deben registrar ante autoridades. 

Recomendaciones 
* Sea precavido a la hora de frenar. Alargue la distancia de seguridad con el vehículo que lo precede, por lo menos 100 metros, por si debe frenar de emergencia tenga el espacio adecuado.

* Los adelantamientos durarán más porque la longitud es mayor. Asegúrese de haber sobrepasado totalmente al vehículo al que adelanta, antes de volver de nuevo al carril.

* Tenga precaución con el viento lateral o cruzado y la velocidad.

* Cuando llegue a una pendiente, reduzca una marcha antes de iniciar la subida y la afrontará con el motor preparado. Trate de tomar el carril lento.

* Revise la fijación del enganche, el funcionamiento del freno del remolque, en caso de tenerlo, y las luces.

* Al descender, adopte una velocidad prudente, utilizando el freno del motor como medio de frenada, siempre que se pueda.

* Recuerde que las ruedas del remolque no siguen la trayectoria del automotor, de ahí que deba circularse lo más abierto posible.

* El remolque se debe cargar después de enganchar. Jamás enganche ni desenganche con el trailer cargado

Proceso

Fotos | Cortesía TC Mideros | LA PATRIA

Este el el proceso de construcción de un remolque en taller TC Mideros. 

1. La construcción de la estructura con hierro, acero, pintura anticorrosiva y epoxica (resistente a la corrosión, abrasión y productos químicos)

2. La adecuación del piso con lámina alfajor o antideslizante y las llantas.

3. El diseño puede variar para el uso o carga que lleve el remolque.