El Risaralda, el río que corre al revés

Albeiro Rudas García

LA PATRIA | Anserma

Poca gente se percata de que el río que sirve de límite a los departamentos de Caldas y Risaralda hace su recorrido de norte a sur, en sentido contrario al que normalmente hacen los otros ríos en el país.

El Río Risaralda está ubicado en la zona Centro Occidente de Colombia, en el centro de la región cafetera. Nace en el alto Morro Plancho, en jurisdicción de Riosucio (Caldas), baña con sus aguas 13 municipios, 8 en Risaralda y 5 en Caldas. La población en su área de influencia es de cerca de 300 mil habitantes.

Esta corriente hídrica, que desemboca en el río Cauca en La Virginia (Risaralda), tiene un gran número de afluentes entre ríos y quebradas, como los ríos Guática, Mapa y Guarne, entre otros. Las tierras de sus riberas todavía conservan algunos bosques, especialmente en su parte alta, pero se reducen con la explotación forestal, sobre todo en Riosucio (Caldas) y Mistrató y Guática (Risaralda).

En su ecosistema habitan cerca de 29 especies de mamíferos 50 de aves, 17 especies de reptiles y 68 acuáticas. Sus aguas son aprovechadas para el riego, generación de energía, riego y consumo humano.

Un río muy contaminado

El principal problema de este gran río es la contaminación causada por los asentamientos humanos ubicados en su área de influencia y los agroquímicos. En un tiempo fue receptor de las basuras de varios municipios.

La explotación de áreas en café y ganadería le han quitado mucho de su bosque y con la extracción de material de río este importante afluente ha bajado sustancialmente su caudal. Ya casi no hay especies acuáticas como poseía en el pasado.

Aún así ofrece excelentes sitios turísticos como el Parque Nacional de Tatamá y en su recorrido valles y cerros de gran belleza.