La novedosa plataforma electrónica para adultos mayores tiene como funciones: Detectar signos tempranos de deterioro físico y establecer planes de intervención, lo que debe llevar a adaptar políticas públicas en salud y bienestar de la población mayor.

Este dispositivo acaba de tener el visto bueno de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC). Por eso, la entidad les otorgó la patente de modelo de utilidad a la Universidad de Caldas y a la Universidad Nacional de Colombia.

Eder Peña, un investigador del proyecto, manifestó a LA PATRIA que con la plataforma se pretende dar solución a la evaluación de la capacidad funcional en las personas mayores.

Dijo también: “Por ende, lo que hicimos fue creer en que ingenieros colombianos y profesionales de ciencias de la salud pueden hacer dispositivos electrónicos”.

Que la evaluación de esa capacidad funcional de personas mayores es a través del alcance funcional y de una batería que se denomina SPPB (detección de fragilidad y predicción de posible discapacidad).

Peña expresó que la patente fue producto de una investigación, Innovación-Creación, con los grupos de investigación, geriatría y gerontología de la Universidad de Caldas y el grupo de Ambientes Inteligentes Adaptativos de la Universidad Nacional de Colombia sede Manizales.

“Llevabamos trás de este producto desde el 2020, en el cual se hizo el primer radicado. Estamos muy felices. Eso no fuera posible solo con el empuje de los investigadores, sino que también tuvimos la colaboración de toda la OTRI de la U. de Caldas y la instancia que requiere la U. Nacional de Colombia, lo que tiene que ver con innovaciones”, adicionó.

Esto es un logro importante de los grupos de investigación mencionados y por supuesto del concurso de MinCiencias y las universidades Caldas y Nacional de Colombia Sede Manizales."

Por sensores

La SIC reconoció que la invención cumple con los requisitos de novedad, nivel inventivo y aplicación industrial establecidos por la normatividad andina.

Destaca que su diseño difiere significativamente de dispositivos previos gracias a la integración de sensores, visión artificial y algoritmos de procesamiento autónomo, agrega la Universidad.

En relación con el impacto clínico explica que la patente representa un importante avance tecnológico en la atención geriátrica.

Además, que demuestra cómo la innovación nacional puede ofrecer soluciones efectivas y humanizadas ante los retos del envejecimiento poblacional, un fenómeno notorio en el Eje Cafetero.

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El desarrollo de la plataforma electrónica para adultos mayores lo lideraron los investigadores Eder Peña Quimbaya, Néstor Darío Duque Méndez, Luis Felipe García Arias y Camilo Alejandro Castillo Benavides.

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La plataforma tiene un módulo sensible de entre 2.800 y 9.600 puntos, permite la conducción electrónica de la postura de la persona y utiliza unas cámaras que captan la información visual desde la plataforma, lo procesan y permiten que se transmita la información a través de una pulsera que se encuentra en la muñeca del usuario.

Evaluación del equilibrio.

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El dispositivo permite la ejecución estandarizada de las pruebas que conforman el Short Physical Performance Battery (SPPB): equilibrio, velocidad de la marcha e incorporación desde una silla, así como la prueba de alcance funcional.

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Estas mediciones son cruciales para detectar signos tempranos de deterioro físico, establecer planes de intervención, y adaptar políticas públicas en salud y bienestar de la población mayor.

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En comparación con tecnologías anteriores, la plataforma mejora notablemente la autonomía del profesional de la salud, ofrece mediciones objetivas y repetibles, y contribuye a la seguridad del paciente durante las pruebas.

Funcionalidad técnica

Evaluación de la marcha.

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La plataforma está equipada con una zona de detección plantar, compuesta por entre 2.800 y 9.600 puntos sensibles, dispuestos sobre un sistema multicapa de materiales conductivos y poliméricos.

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Esta zona detecta la presión y posición de los pies del evaluado. Los datos son procesados por una unidad electrónica central, alimentada por una tarjeta de adquisición de datos y complementada por hasta cuatro cámaras que capturan imágenes y movimientos.

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El sistema incluye una pulsera electrónica, que permite monitorear en tiempo real los movimientos del brazo, esencial en la evaluación del alcance funcional, proporcionando una solución integrada que guía al evaluador y reporta con precisión los resultados de cada prueba.

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La U. de Caldas afirma que el dispositivo, que ya cuenta con protección legal bajo la Resolución No. 29458, destaca por su combinación de tecnología sensorial avanzada, procesamiento electrónico y seguimiento visual, con el objetivo de mejorar significativamente la evaluación física de personas mayores, reduciendo la dependencia de cronómetros manuales, observaciones subjetivas y errores humanos. Y que estará protegido hasta el año 2030.

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Añade que la Otri n-lace de la U. ha acompañado y liderado la estrategia legal e institucional para defender esta solicitud. "Este logro refleja el compromiso de la Universidad de Caldas y de la Otri n-lace con la protección de desarrollos tecnológicos orientados al bienestar social, en este caso, al servicio del envejecimiento activo y saludable".

Evaluación de incorporación desde una silla.