Foto | Cortesía Comité de Cafeteros | LA PATRIA
El Comité de Cafeteros de Caldas invirtió $4 mil 193 millones en su eje social durante el 2024 con su modelo educativo rural Escuela Nueva.
Cerrar las brechas y aumentar la calidad son las grandes carreras de la educación. Hace 40 años el Comité de Cafeteros de Caldas decidió ayudar a cumplir los objetivos: implementó en municipios del departamento el programa modelo educativo rural con Escuela Nueva.
Al 2024 han logrado gestionar una alianza que hoy se llama Educación para la competitividad, donde tienen a cerca de 35 actores públicos y privados trabajando de la mano.
“Para nosotros esto ha sido muy significativo, y gracias a esta alianza hemos ampliado las oportunidades de los jóvenes rurales en el campo y llevar más programas de calidad”, menciona Sonia Isabel Villegas Duque, coordinadora de desarrollo social programas de educación del Comité de Cafeteros de Caldas.
En función
Así las cosas, Educación para la competitividad permite que estudiantes de colegios públicos de la zona rural de Manizales y los otros 26 municipios de Caldas puedan graduarse como profesionales de la Universidad en el Campo, gracias a una articulación entre la educación media y la educación superior.
Entre las iniciativas de los programas están:
*Escuela nueva
*Escuela y café
*Escuela y seguridad alimentaria
*Escuela virtual
Además, trabajan de forma transversal la línea de emprendimiento y empresarialidad, lo permite que los jóvenes en el campo apoyen a sus familias y a la comunidad a mejorar los procesos productivos desde los puntos técnico y administrativo como valor agregado y aporte de la educación al campo.
Alcance
En los 40 años, el Comité de Cafeteros ha gestionado apróximadamente $64 mil millones a través de la alianza de educación, y en el 2024 la gestión fue de $4 mil 193 millones.
El año pasado, además, Escuela Nueva llegó a 770 sedes educativas de Caldas y se atendieron a 17 mil 300 estudiantes.
A la fecha hay seis universidades públicas y privadas que ofertan sus programas mediante la articulación. “Un valor agregado es que trabajamos los fines de semana en las instituciones educativas rurales donde se promueven los programas. Para nosotros esto ha sido de mucho impacto y ha mejorado los indicadores departamentales del nivel técnico y tecnológico en términos de formación”, complementa la coordinadora.
Novedad
Por otra parte, la Universidad en el Campo atendía en presencialidad y exigía unos números de estudiantes para poder conformar un grupo. Hoy el modelo incorporó la modalidad combinada, que permite trabajar desde la virtualidad.
Para lograrlo se unió con la Universidad Nacional Abierta y a Distancia (UNAD) y la Universidad de Manizales. Actualmente llegan a 11 municipios y aportan al objetivo de llevar mejores oportunidades y cerrar las brechas en la educación.
