Fotos Cortesía Mintic I LA PATRIA
Los cinco hábitos que propone Mintic se complementan y conforman una ruta integral para que las vacaciones sean una oportunidad de aprendizaje, descanso y bienestar.
El descanso escolar trae un desafío extra para los padres: controlar el tiempo que los menores pasan expuestos a las pantallas digitales. El programa Ciberpaz del Ministerio TIC comparte recomendaciones para cuidar a los niños y niñas frente a esta problemática.
Las vacaciones suelen estar llenas de excesos. Comida, pereza, fiesta, entre otras actividades que día a día se dificultan, colman estas semanas de descanso. Y estos tiempos modernos han creado un nuevo exceso: las pantallas digitales. Ante un mayor tiempo libre, es de esperarse que los scroll en las redes sociales se vuelvan eternos.

Estas semanas representan un momento ideal para promover actividades que desarrollen creatividad, imaginación y capacidad de análisis
Esta situación genera preocupación y en especial cuando se piensa en los menores de edad, que al estar sin colegio tienen más tiempo para navegar en sus dispositivos, más cuando los padres deben seguir en su trabajos.
Es un tema que ya ha llamado la atención de las autoridades. Por ejemplo, según Unicef, durante las vacaciones los menores pueden pasar entre dos y cuatro horas adicionales frente a pantallas.
Este aumento no es negativo en sí mismo, pero sí exige reforzar prácticas que favorezcan una navegación más segura, equilibrada y consciente.
Emocional
Para ayudar a los padres a darle manejo a esta situación, el programa Ciberpaz del Ministerio TIC llama la atención hacia el acompañamiento emocional, el diálogo frecuente y la educación en ciudadanía digital como claves para fortalecer el bienestar de los menores en entornos conectados.
El psicólogo Juan Diego Galindo, especialista en pedagogía, enfatiza que el punto de partida es construir acuerdos familiares claros: no prohibiciones estrictas, sino normas que ayuden a comprender cuándo la tecnología es útil, y cuándo hay que pausarla: “Los niños aprenden por observación. Si un adulto es ciberdependiente, el niño entenderá que esa conducta es normal y la replicará”, señala.
Su recomendación es promover espacios de desconexión, como comidas, juegos o actividades creativas, para fortalecer vínculos familiares y el bienestar emocional.
* Información del Mintic.
Desde Ciberpaz, programa del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Minctic) comparten cinco recomendaciones:

1.
Regular los tiempos de conexión y promover el equilibrio
La evidencia científica muestra que pasar muchas horas frente a pantallas
puede afectar el sueño, la atención y la actividad física. Frente a esto, Galindo
propone una regla sencilla: si un menor pasa varias horas frente a pantallas,
debe dedicar un tiempo equivalente a actividades físicas, creativas o sociales.
2.
Reforzar la privacidad y la seguridad digital
Las vacaciones suelen implicar mayor actividad en redes. Es clave revisar
configuraciones de privacidad, limitar la información que se comparte y
desactivar la ubicación en tiempo real. “Antes de entregar un celular, hay que
preguntarse si el menor tiene la madurez emocional para usarlo sin ponerse
en riesgo”, recuerda el psicólogo, y señala que lo ideal es evitar el uso antes de los 13 años, siempre considerando el contexto y la formación familiar.
3.
Fomentar interacciones respetuosas y empáticas
La participación en juegos y comunidades digitales aumenta durante estas
semanas, y con ella la posibilidad de conflictos o exposición a comentarios
ofensivos. Según Ciberpaz, educar sobre el impacto que tienen las palabras en línea y enseñar a reportar situaciones de violencia digital resulta fundamental: promover el respeto, el buen trato y la moderación emocional ayuda a construir entornos digitales más seguros y saludables.
4.
Acompañar el uso de la inteligencia artificial
Chats automatizados, asistentes digitales y plataformas basadas en IA son
cada vez más usados por niñas, niños y adolescentes. Galindo advierte que la
IA “simula empatía, pero no la siente”, por lo que no debe convertirse en
sustituto del acompañamiento emocional. Las familias deben conocer
herramientas antes de permitir su uso, y evitar que los menores compartan
datos personales o dependan afectivamente de estos sistemas.
5.
Fortalecer el pensamiento crítico y la alfabetización digital.
Identificar fuentes confiables, reconocer contenido falso y comprender cómo
funciona la huella digital son habilidades esenciales para navegar de manera
segura.
Para complementar
Los cinco hábitos se complementan y conforman una ruta integral para que las vacaciones sean una oportunidad de aprendizaje, descanso y bienestar. Finalmente, hay que recordar que estas semanas representan un momento ideal para promover actividades que desarrollen creatividad, imaginación y capacidad de análisis, elementos que, según Galindo, no nacen de la tecnología: “La creatividad se alimenta de experiencias humanas: conversar, leer, jugar, explorar el territorio”.