Trabajan por la protección del mono aullador

Esteban Gallego
LA PATRIA | MANIZALES

Sebastián Bustamante Manrique vio por primera vez un mono cuando cursaba quinto semestre de Biología en la Universidad de Caldas. Se encontraba en La Reserva Natural Yotoco, en una salida académica que poco tenía que ver con mamíferos. 

Sebastián se perdió de su grupo de estudio y escuchó, en el corazón del bosque, los aullidos de uno de los primates más grandes del neotrópico y que hoy se pasea por la vereda La Cristalina de Neira. 

El mono aullador rojo (Alouatta seniculus) es una especie herbívora que se alimenta, sobre todo, de hojas nuevas y maduras. Se movilizan en grupos de hasta 25 individuos, son pasivos pues deben descansar largos periodos de tiempo por su dieta y utilizan su vocalización, la segunda más potente del reino animal, para marcar territorio. 
 

Único

En la vereda La Cristalina, cercana a la antigua fábrica de Cementos Caldas, el semillero de investigación en primatología y conservación de sus ecosistemas de la Universidad de Caldas, le sigue  el rastro a esta especie desde el 2014. 

Este semillero, fundado por Sebastián, encontró varios grupos de monos aulladores que suelen constituirse en 16 individuos. Como sucedió con él, varios de sus compañeros recuerdan el primer encuentro como único.

Un momento indescriptible, Maria Alejandra Rivillas Carmona explica que luego de varias horas caminando con sus compañeros del semillero, vio por primera vez a un macho que yacía solitario desde una rama. “Me enamoré de la especie y, en general, de los primates. Uno entiende la importancia de la protección de la biodiversidad en bosques de alta montaña como éste que, además del mono aullador, alberga especies endémicas de aves y anfibios”.

Deben protegerlos

Si bien, ambos biólogos afirman que la conservación del bosque que comienza en La Cristalina y que rodea los municipios de Salamina y Marulanda, está en buenas condiciones, advierten que el terreno es de privados y que, en los últimos años han deforestado una gran cantidad de hectáreas para la ganadería e, incluso, para la industria minera. 

Para el Semillero es fundamental generar estrategias para que esta zona sea protegida por la Administración departamental.

La secretaria de Desarrollo Rural y Medio Ambiente en Neira, Sandra Viviana Galeano, dijo que están identificando los puntos del bosque por los que se movilizan estos monos para comenzar a educar a los turistas y construir programas para la protección de la especie.

Ver y no tocar

Si se encuentra por la zona y encuentra un mono aullador, siga las instrucciones:

• Avance en silencio a una distancia prudente para verlos mejor o tomarles una fotografía.

• No intente alimentarlos. Esto puede habituarlos a los humanos, lo que los hace indefensos a inescrupulosos y posibles cazadores.

• No vaya al lugar con sus mascotas. Las heces de ambos animales pueden cruzar parásitos lo que los debilita.

• No arroje basuras al lugar y proteja el hábitat del mono aullador.