COLPRENSA | LA PATRIA | Ibagué
Como ya es tradición, ayer se rindió homenaje a las víctimas que hace 27 años fallecieron la noche que desapareció Armero. Uno de los socorristas que estuvo con Omaira recordó con nostalgia uno de lo más fuertes episodios del desastre natural.
Pese a que ya pasaron 27 años de la noche que todo cambió para los armeritas, hoy son muchos los que recuerdan esa fecha con nostalgia y algunos con tristeza traen a colación el poco apoyo que han tenido de los gobiernos de turno.
Algunos de los sobrevivientes crearon fundaciones y aseguran que se debería cambiar la construcción de parques por más apoyo a cientos de personas que aún no han podido recuperar lo que tenían.
Gustavo Prada, presidente de la Corporación Casa Armerita, afirma que pareciera que acabaran de salir de la tragedia y que ese hecho marcó un cambio drástico para todos.
“Desde esa fecha en lo único que se ha preocupado el Estado es en hacer monumentos y clausurar todo un pueblo que aunque sufrió mucho, aún tiene personas guerreras con ganas de volver a vivir"
“La idea de nosotros es que no se hagan más monumentos donde se gasta dinero, sino por el contrario se mire a los armeritas como personas productivas. Tenemos seis parques que mantienen en total abandono”, comentó.
Ayudar a las personas
Agregó que en vez de estar pensando en parques a la vida y más homenajes, sería bueno ayudar a estas personas que hace 27 años lo perdieron todo, “se debería formar microempresas o al menos preocuparse por ellos, cómo están y en qué situación se encuentran realmente”.
Confesó que entre los sobrevivientes muchas veces hay nostalgia porque han sido pocas las ayudas y no entiende cómo poblaciones tanto de Colombia como de otras partes del mundo que han sufrido catástrofes sí se han podido recuperar.
“Debemos reclamar lo que nos pertenece, aún se encuentra allí nuestra tierra. No debemos pensar que solo nos van a hacer un parque que sirva de turismo y nada más”, señaló.
Sobre los homenajes que se han venido desarrollando, siente que se tratan de hechos para recordar a sus seres queridos y en ocasiones para reencontrarse con ellos.
Pero para otros, se trata solo de una fachada porque en la actualidad hay personas en situación de discapacidad como resultado de la tragedia, a las que ningún tipo de entidad les ha ayudado para un cambio de prótesis.
Prada afirmó que conmemorar 27 años es una fecha más de frustración al saber que Armero no es la misma ciudad de antes y que se ha hecho poco para recuperarla.
Con otros ojos
Para la subdirectora del Servicio Geológico Colombiano, antes Ingeominas, Martha Calvache, el país se encuentra hoy más preparado para enfrentar una tragedia que hace 27 años.
“Los cambios son muchísimos, hoy tenemos más capacidad tecnológica, instituciones responsables de prevención y atención de emergencias, pero no somos perfectos”, señaló.
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