Niño de dos años murió al manipular un arma

Un niño de dos años y medio murió víctima de un balazo en el rostro en el barrio Andalucía, de Caldas, sur del Valle de Aburrá.

El comandante Operativo de la Policía Metropolitana, coronel Fabio Rodríguez, dijo que el niño, nacido en marzo de 2010, estaba con una joven y su novio, quienes lo cuidaban mientras que su madre se presentaba ante las autoridades porque tiene casa por cárcel.

"Una señora bajó de un quinto piso con un niño en sus brazos. Entonces una patrulla del CAI cercano auxilió a la mujer y se enteró de que el pequeño tenía un tiro en la cara y lo llevaron al hospital donde murió", dijo Rodríguez.

La Policía retornó al apartamento y encontró el revólver, calibre 38 largo, que no tenía documentos. La mujer indicó que el niño lo manipuló y se pegó el tiro, por ello la pareja fue dejada a disposición de la Fiscalía.

La madre del pequeño fue capturada hace dos meses y medio en un operativo de la Policía realizado en el barrio La Miel, de Caldas, en el cual fueron aprehendidas otras cinco personas.

Otros hechos

De otra parte, se informó que la Policía dejó en manos de la Fiscalía la investigación por las heridas en el abdomen que sufrió una niña de nueve años que, en el barrio Santa Inés, de Manrique, quedó el martes en medio de un tiroteo entre la Sijín y haladores que recibieron a bala a la Fuerza Pública.

Consternación por suicidio

En Mariquita (Tolima) generó consternación el suicidio de una niña de 14 años en el interior de un colegio de la localidad.

La menor se ubicó en el patio principal, sacó de su bolso un revólver calibre 38 y para llamar la atención hizo un disparo al aire y estuvo largo tiempo blandiendo el arma, colocándosela en diferentes partes del cuerpo, hasta que finalmente se apuntó en el estomago y se disparó.

Al primer tiro acudieron las directivas del colegio, agentes de la policía, sicólogos y el comisario de familia de la alcaldía, para tratar de persuadirla para que reconsiderara su decisión y entregara el arma.

Sin embargo, la niña no atendió sus clamores.