Las basílicas mayores
Señor director:
A las iglesias de San Pedro, San Juan de Letrán, Santa María la Mayor y San Pablo Extramuros, la PATRIA CHICA del 27 de abril las considera Capillas Pontificias. No son capillas, denominación para iglesias pequeñas. Son basílicas papales, llamadas antes patriarcales porque estaban asignadas a los patriarcas orientales. Y este cambio lo lamento de veras.
La de San Pedro en el Vaticano es la iglesia más grande del mundo, pero no es la catedral de Roma. San Juan de Letrán, denominada también archibasílica del Salvador (o sea de Cristo), es la catedral, la iglesia del papa como obispo de Roma.
La “cátedra de San Pedro” es la silla que se encuentra en el grupo escultórico que está junto al “altar de la cátedra”, en el ábside (esto es, al fondo de la basílica vaticana; no es la sede o silla auténtica, sino que procede de la época carolingia -de Carlomagno y sucesores, Edad Media-). La cátedra del obispo de Roma se halla en la basílica laterana o lateranense de San Juan de Letrán.
En la basílica petrina, además del altar de la cátedra, está el “altar de la Confesión”, que lleva este nombre porque en ese lugar el Apóstol San Pedro “confesó” la fe en Cristo al recibir el martirio. El altar de la Confesión queda bajo el baldaquino conocido como La Gloria de Bernini. La cátedra del ábside está sostenida por las estatuas de cuatro grandes Padres de la Iglesia: San Atanasio y San Juan Crisóstomo, griegos u orientales; San Agustín y San... ¿Ambrosio o Hilario?, latinos u occidentales.
El vocablo “basílica” proviene del griego y se traduce por “real” o “del rey”, porque en la antigua Roma las basílicas eran edificios públicos y, en cuanto tales, pertenecían al rey (basileus) o, mejor, al emperador, al Estado romano.
La de San Pablo fue erigida cerca del sitio donde el Apóstol de las Gentes fue martirizado, fuera de los muros de Roma; de ahí el nombre de Extramuros.
La de Santa María fue la primera iglesia dedicada en Occidente a la Virgen; entiendo que es la iglesia mariana de mayor tamaño en el mundo, característica que justifica el apelativo de la Mayor. Se la conoce también como basílica liberiana, porque el papa Liberio, en la antigüedad, tuvo mucho que ver en la construcción o reconstrucción, o en la dedicación o consagración.
Observador Católico