Propuesta para el alcalde de Manzanares
Señor director:
El tiempo corre deprisa y el período de los funcionarios elegidos por el voto de los ciudadanos se agota. Es oportuno recordarles que, al término de su mandato, deben dejar obras que constituyan un progreso tangible para el territorio que le fue confiado para su administración.
En este sentido, quiero dirigirme de manera concreta al alcalde de Manzanares para manifestarle que este pueblo requiere, sin dilaciones, una obra fundamental para su desarrollo, que las administraciones anteriores, lamentablemente, no han tenido en cuenta. Se trata de la construcción del “Teatro Manzanares”, un espacio cultural que se perdió cuando fue adquirido por don César Julio Cardona y convertido en un depósito de café.
La propuesta consiste en aprovechar las instalaciones de la antigua Trilladora Guadalupe. La idea es construir un nuevo teatro respetando y ampliando la fachada original, manteniendo su estilo arquitectónico y utilizando los lotes aledaños, tanto a la derecha como a la izquierda, para expandir el espacio. Esta edificación podría convertirse en un moderno y funcional centro cultural, capaz de albergar una variedad de eventos comunales, culturales y políticos.
Si el municipio carece de los recursos necesarios, se podría considerar una estrategia financiera innovadora: realizar una convocatoria pública para entregar el proyecto en comodato. De esta manera, no solo se dotaría al pueblo de un teatro moderno, sino que se garantiza su gestión y dinamización a largo plazo, sin que la carga económica recaiga exclusivamente sobre la Administración municipal.
Con la realización de esta obra, el actual alcalde dejaría para la posteridad un legado invaluable, un recuerdo perdurable de su paso por la Alcaldía durante los tres períodos. Sería una muestra concreta de su compromiso con la cultura y el progreso del pueblo, un hito que enriquecería la vida social y cultural de Manzanares para las futuras generaciones. Un teatro no es solo un edificio; es un espacio donde se fomenta la creatividad, el diálogo y el sentido de comunidad.
La segunda obra, que quedará para la próxima Administración, será la variante, para evitar el paso por la calle Real, de vehículos de carga pesada y buses.
Fabio Ramírez Ramírez