Asonadas pro delincuencia
Señor director,
Mientras Petro se dedica en el exterior a exacerbar la delicada situación de nuestro País con EEUU y su presidente Trump por la descertificación con sus insultantes frases ante la Asamblea de la ONU y contradictoriamente aboga por paz en el mundo, sin aludir a Rusia-Ucrania, la delincuencia en nuestro país profundiza su estrategia para proteger de la justicia a sus más reconocidos cabecillas, instrumentalizando a la población civil para contrarrestar la acción de la fuerza pública en sus operativos.
Situación resultante de las gabelas otorgadas por Petro, bajo supuesto uso de facultades constitucionales dentro del fracasado proceso de paz total, designándolos gestores, suspendiendo órdenes de captura, negando extradiciones, adelantando conversaciones, mientras se apoderan, atacan, desplazan, confinan y someten vastos territorios en cerca de 800 municipios del País, limitando y desestimando al ejército y la policía en el cumplimiento de su deber constitucional, al dejar por fuera a sus más experimentados y preparados oficiales y otorgar mayor capacidad a la ilegalidad que al trabajo legítimo del Estado. Situación que amenaza con extenderse al sector urbano por lo visto esta semana con estación del Transmilenio en Bogotá cuando delincuentes armados de cuchillo pretendieron impedir la labor de los guardias contra los colados. Todo ello parece consecuencia, primero del renombrado y evidente pacto de la Picota liderado por el hermano de Petro, Juan Fernando y segundo con los miembros de la primera línea que tanto influyeron para hacer posible la elección del presidente, recurriendo incluso a amenazas de incendiar el País en caso de no lograr su cometido. Mientras todo eso ocurre, el Ministro de Defensa se limita solo a reconocer la ilegalidad de lo que están haciendo, sin acciones concretas para impedirlo.
Mucho temor que esto se acreciente en época pre electoral, cuando Petro debe tener claro lo que le espera junto a sus secuaces y protegidos en caso de salir del poder y frente a lo cual ya ha comenzado a enfilar baterías para asegurar la permanencia a través de sus más fieles seguidores. El reforzamiento de sus bodegas financiadas con presupuesto público y que inundan las redes sociales así lo corroboran. Por algo acaba de contratar con recursos oficiales a un personaje de nombre German Trejo, quien se presenta en Linkedin como CEO de Battleground Solution, supuestamente la segunda firma de consultoría política más grande de Latinoamérica, pero contra quien El Tiempo publicó señalamientos y estafas a personas que laboraron con él, por presuntamente haberlos dejado con cuantiosas deudas e incumplirles con sus salarios. Trejo al parecer ingresó al gobierno como asesor de comunicaciones. Obvio para la campaña política en curso.
Son graves peligros los que enfrentan nuestra institucionalidad y democracia y que requieren como nunca de la acción decidida de las gentes de bien en su deber de cuidar al País de las garras de este reconocido enemigo que nos quiere seguir acechando en la persona de sus incondicionales. El riesgo para todos, es real, no imaginario. Evitemos con el voto a conciencia, 4 años más de destrucción.
Cordialmente,
Alberto Arce Londoño