Estábamos hablando de César Uribe Piedrahita al que regaló el mariscal Johannes Erwin Eugen Rommel, “El zorro del Desierto”, una hermosa espada por haberlo curado de una fiebre cerebral. Este hecho ocurrió en Egipto en la época de las célebres batallas de El Alamein y El-Agheila. César descubrió en el desierto de La Tatacoa una araña venenosa de la familia de la temida viuda negra y la clasificó con el nombre científico de Latrodectus coya. Su nombre vulgar es araña coya. En el mismo desierto unos biólogos de la Universidad de Los Andes descubrieron una pariente de la misma viuda negra y me la dedicaron con el nombre de Latrodectus hurtadoi. Y también hablábamos del médico Carlos Uribe, pariente de César y poseedor actual de la famosa espada.
Carlos es quien introdujo en Colombia la artroscopia de rodilla, especialidad en la que es el más famoso cirujano. En ejercicio de su profesión de traumatólogo ha operado a varios presidentes de Colombia, a celebridades y a conocidos deportistas de varios países. Carlos, igual que César su pariente, es un hombre polifacético: médico, pintor, escultor, fotógrafo, conferencista y uno de los principales orquidiólogos de Colombia. Como tal ha descubierto y clasificado unas 70 orquídeas nuevas para la ciencia. Una de ellas descubierta en el Guaviare me la dedicó y lleva el nombre científico de Epidendrum hurtadoi.
En la actualidad está publicando todas las orquídeas de Colombia. Lleva ya editados tres libros de lujo, profusamente ilustrados con fotografías del mismo Uribe. Bueno es recordar que Colombia es el país que posee la mayor cantidad de especies de orquídeas en el mundo. Estos Uribe forman una familia de científicos; además de los dos ya nombrados está el jesuita Lorenzo Uribe, gran botánico y también zoólogo. Su nombre completo era Antonio Lorenzo Uribe Uribe. César y Lorenzo ya fallecieron. El presidente Duque, en octubre del 2020, por Ley 2059 proclamó a Orocué Patrimonio Histórico y Cultural de la Nación. ¿Motivo? La estancia allí de José Eustasio Rivera y el parto de La Vorágine.
Se puede decir que en este año 2024 Colombia se encuentra en “modo Vorágine” por el centenario. Son múltiples los actos de todo tipo, conferencias, foros, exposiciones, conciertos, diálogos que se organizan en varias ciudades para conmemorar el acontecimiento. El Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, como se denomina ahora en el Gobierno de Petro el Ministerio de la Cultura, organizó una conferencia en la Biblioteca Nacional de Bogotá, el 28 de mayo de este año, en mi honor, y me pidió que fuera yo mismo el conferencista.
Lo hice con sala llena. El ministro quería hacerme un homenaje en nombre del Gobierno. Mi charla versó, como era natural, sobre La Vorágine, José Eustasio, los crímenes de las caucherías y la selva amazónica. Al terminar, el Ministerio me hizo el valioso obsequio de la colección que acaba de publicar para celebrar el centenario de La Vorágine.