La historia del periódico El Espectador es, en buena medida, la historia de la Colombia republicana. De esa Colombia que, tras la Constitución de 1886, configuró un Estado de derecho con sus luces y sus sombras. Un país que buscaba salir adelante en medio de la pugnacidad política que lo convirtió en un territorio de permanente contienda: ideológica, y casi siempre, armada.

Sin medias tintas: tres siglos de historia de Colombia en El Espectador es un libro escrito a cuatro manos por Jorge Cardona Alzate —ese sí editor ejemplar, de profundas raíces caldenses— y María José Medellín Cano, heredera de una tradición familiar y periodística que, aunque ya no propietaria de la casa, sigue siendo parte viva de ese bastión del buen periodismo.

Fidel Cano, fundador del entonces semanario El Espectador en Medellín, lo creó para defender las ideas liberales y hacer oposición al mandato conservador que se iniciaba con la puesta en práctica de la Constitución de Rionegro. Desde el principio entendió la importancia de debatir ideas, de defender la libertad de pensamiento y de expresión como forma de conversación social.

También comprendió que asumir esos principios demoliberales implicaba correr riesgos. Los autores nos hablan de ese personaje y de su forma de ver el mundo, mientras nos cuentan —a través de editoriales, columnas y noticias— la historia del país.

El libro recorre los momentos clave del periódico y de Colombia. Nos presenta a los personajes que hicieron de esa vitrina periodística un lugar de reflexión constante y de resistencia en demasiados episodios para un país que se dice democrático. Está escrito en forma periodística, lo que permite insertar con naturalidad fragmentos de editoriales, noticias y opiniones que nos van llevando por los hitos de nuestra historia y, por supuesto, de nuestro periodismo.

Quienes leímos Días de memoria, ese texto imprescindible de Jorge Cardona —que debería ser lectura obligatoria en carreras humanísticas—, encontraremos aquí el mismo vértigo narrativo, especialmente cuando se refiere a las violencias de los años 80 y 90. Fue una época dramática para el país y para El Espectador, que sobrevivió a pesar de los homicidios (el más emblemático, el de ese maestro de la pluma y de la ética que fue Guillermo Cano), los bombazos y el cerco económico decretado por el Grupo Grancolombiano.

La supervivencia de este medio, hoy propiedad del Grupo Santo Domingo, es también una lección sobre lo que significa contar con periodistas capaces de interpretar los tiempos mientras escriben la historia en el momento mismo en que sucede. Este libro es un homenaje a quienes hacen posible el buen periodismo. Pero no crean que es un panegírico: también están allí los errores, las metidas de pata, los momentos de confusión en la dirección, las intentonas de censura. Y eso lo hace aún más valioso.

También habla de las transformaciones del periodismo a lo largo del tiempo y de los retos que la tecnología impone a medios más que centenarios como El Espectador, que camina hacia su sesquicentenario.

Si quieren conocer más sobre esta historia y este libro, nos vemos hoy a las 2:00 p.m. en la Feria del Libro de Pereira, donde conversaré con dos periodistas que pasaron por esa casa editorial: María Jimena Duzán y uno de los autores, Jorge Cardona Alzate, el memorioso. La charla se titula "El legado de Guillermo Cano", encuentro a propósito del centenario de su nacimiento". Allá los esperamos para que Hablemos de libros y de periodism, por supuesto.

Subrayado

"Cada día se escriben nuevas páginas para contar el devenir de una nación que ha visto cómo la libertad de expresión se paga también con la muerte. En busca de paz, inclusión, libertad, justicia social y democracia para Colombia, la orden de Guillermo Cano sigue intacta: creer en la justicia a pesar de todo y defender los derechos humanos sin medias tintas".

Con esta lección de ética para cualquier medio de comunicación concluye este libro.

Reproducción | LA PATRIA

Sin medias tintas - Tres siglos de historia en Colombia en El Espectador. Libro del que hablará hoy en Pereira Jorge Cardona, coautor del texto, con María José Medellín Cano.