Gonzalo Duque Escobar

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Aunque la deforestación se ha convertido en un desafío ambiental urgente a nivel global, en Colombia no para. Justamente respecto al 2023, en el 2024 el país registró un aumento en las cifras de deforestación, alcanzando 107.000 hectáreas. Y si en el Amazonas y en particular sobre la Serranía de Chiribiquete, factores como la actividad agropecuaria y la expansión de la infraestructura vial siguen ejerciendo una gran presión sobre el bosque y sus pueblos nativos, también actividades como la minería ilegal y cultivo de coca agravan la situación.

Actualmente, se reportan 80 km de vías ilegales y 525 hectáreas deforestadas en el PNN Chiribiquete con fines ganaderos y actividades ilegales de grupos armados con grave impacto directo en los bosques primarios y la biodiversidad, a las que se suman 856 hectáreas arrasadas en el resguardo multiétnico de Llanos del Yarí-Yaguará II generando desplazamiento forzado de indígenas asentados al interior de Chiribiquete, que con una extensión de 43.000 km² es el PNN más grande del país.

Es que el citado santuario natural, cuyo nombre significa “La Maloca del Jaguar”, ubicado entre Caquetá y Guaviare, con sus mesetas de arenisca que sobresalen en la selva y que, además de haberse declarado Parque Nacional mediante Acuerdo No. 0045 del 21 de septiembre de 1989, también la UNESCO en el 2018 lo reconoce como Patrimonio Mixto de la Humanidad por ser punto de confluencia para la conectividad y preservación de la biodiversidad de cuatro provincias biogeográficas: Amazonía, Andes, Orinoco y Guyana.

En Chiribiquete, están los yacimientos de arte rupestre más grandes y antiguos del continente, con 75.000 cifras de gran monumentalidad en su significado y fuerza artística, elaboradas por pueblos indígenas en las paredes de 60 refugios rocosos que surgieron 20.000 años antes de la era común (BCE), y cuya ubicación oculta por miles de años se debió a la selva, lo que invita a replantear la hipótesis de que la presencia del hombre en América se remonta apenas a 12 mil o 14 mil años en la teoría de la ocupación tardía o temprana del continente.

Además, en el PNN Serranía de Chiribiquete, cuyas formaciones rocosas presentan altitudes entre 200 y 800 metros, se han identificado 67 plantas endémicas para Colombia, entre una notable variedad que representa más de la tercera parte de las especies endémicas registradas en la Guyana colombiana, 16 de ellas exclusivas de Chiribiquete, y al menos 10 nuevas para la ciencia, a lo que se suman otras especies menos estudiadas de fauna endémicas y exclusivas de Chiribiquete entre las que sobresalen algunas aves y mamíferos.

Para combatir este problema en nuestra amazonía, además de leyes ambientales más estrictas, resulta crucial implementar prácticas sostenibles y de conservación activa, promoviendo la reforestación y el fomento de modelos agrícolas sostenibles, lo que implica un compromiso colectivo para promover la sostenibilidad y conservación de nuestros valiosos recursos naturales, ya que sólo a través de esfuerzos concertados podemos revertir la tendencia actual para convivir con la naturaleza.