Vivimos en el mundo postmoderno donde todo es posible y casi nada es cierto.
  No sabemos exactamente qué hacer con nosotros mismos ni tampoco a donde ir.
  El mundo de nuestras experiencias se muestra caótico, desconectado y confuso.
  Los expertos nos explican todo sobre el mundo, pero entendemos cada vez menos nuestra propia vida. 
  Sabemos todo de nuestros órganos, sus funciones y su estructura, pero se nos esfuma el espíritu.
 Sabemos mucho más que nuestros  ancestros,pero ellos sabían algo más esencial que se nos escapa.
 La salida está en trascender y apelar a lo espiritual, ir más allá de lo aparente y buscar lo esencial
 Está en el amor, en sintonizar con el mismo Dios de todos, con el bien y la verdad. 
Texto de Vaclav Havel.
@gonzalogallog