La película “Romper el círculo” toca una triste realidad que interesa a muchas personas.

Se enfoca en las relaciones tóxicas de la protagonista, que repite lo que sufrió su mamá.

Liliana es una florista con un pasado complicado, que se enamora de un neurocirujano sexi y abusivo.

El guionista seguramente sabe algo de lo que se sana en Constelaciones familiares.

Hay violencia familiar en un triángulo afectivo que solo genera problemas para todos.

Son “lealtades invisibles” con los ancestros, que hay que soltar y sanar para poder estar bien.

Un porvenir sombrío espera a quien sufre en el presente, hasta que arregle su pasado.

Si sufres y te identificas con el tema, haz una buena terapia de Constelaciones familiares.

@gonzalogallog