Si yo te digo que siempre te pongas en el primer lugar, ¿qué piensas al respecto?
Se lo he dicho a varas personas y me han comentado: “No, eso es mucho egoísmo”.
La verdad es que es todo lo contrario, es una muestra de un fuerte y positivo amor propio.
Ubicar de primeros a los demás desnuda un frágil autoamor y te impide dar lo mejor.
Es fácil que al hacerlo estés buscando aprobación o mendigando el cariño de los otros.
Por lo mismo, acéptate, valórate, quiérete y cuídate.
Reconoce tu grandeza porque eres uno con Dios.
En una inculta cultura abundan los que no se aman y, por eso, crean relaciones tóxicas.
Decreta mucho: “Gracias, Dios, me amo y te amo. Me pongo en el primer lugar y así amo mejor a todos”.
@gonzalogallog