Mientras 14.000 niños de Palestina, junto a Gaza, agonizan por el hambre y la mala alimentación, llegan noticias de cómo en algunos países la obesidad aumenta sobre todo en la joven población debido a la abundante inadecuada alimentación.

Comer no basta. Se habla de comida chatarra no apta para el buen desarrollo de la persona. Muchos seres humanos crecen con deficiencias mentales y físicas y en la raíz está la poca, la desequilibrada alimentación o el desorden en la ingesta de comidas.

Ya existen tablas que ayudan al buen consumo de alimentos, indicaciones para aprender no tanto a comer, sino a saberse alimentar para gozar de buena salud, buen crecimiento, apto rendimiento, consumo apropiado de lo necesario para gozar de buena salud.

Una vida saludable se expresa en rendimiento físico, mental, laboral, estudiantil y en toda la actividad humana y profesional. Una alta consecución de medicinas tiene que ver con el control de malestares y enfermedades cuya causa es la mala alimentación, el confundir lo bueno con la gran cantidad o el mucho dulce o sal, grasa o sequedad.

Todo ello nos lleva a la conclusión de que debemos notar el trabajo profesional que hoy resalta el mundo. Hoy es el Día del Dietista, aquel o aquella que se desempeña en el saludable servicio y orientación de cómo debe ser nuestra alimentación, su cantidad y calidad, lo que más nos conviene.

Es el o la dietista un servidor que adquiere un valor de primer orden, ya que de seguro una buena nutrición da el resultado de una mejor salud, de un bienestar más generalizado, de mayor duración en edad y vitalidad, de un espíritu vivaz para el trabajo, el servicio, el buen humor, el optimismo tan necesarios hoy.

Algo que según la Biblia influyó en establecer al pueblo del Éxodo, que venía cansado y agotado de años de travesía y camino, fue la constancia visualizada y real de la fecundidad de esa tierra a donde iban, ya que los encargados enviados de mirar el estado de la tierra llegaran con las muestras de fecundos productos, grandes y finos, fruto de una agricultura que regala el brote de alimentos, grandes y atractivos frutos para una buena alimentación. Acá nos quedaremos, fue la respuesta.

Gracias a quienes nos indican los alimentos más propicios para nuestra mejor salud, mejor bienestar y futuro. Gracias a dietistas, benefactores nuestros.