Fecha Publicación - Hora

Derrotar la pandemia de covid-19 exige muchos esfuerzos de la sociedad. Desde que comenzó esta emergencia sanitaria global hemos tenido que pasar por una serie de restricciones en diversos sentidos, que en algunos momentos exigió una cuarentena total, un confinamiento que también significó afectaciones para la salud mental y consecuencias económicas de las que aún no nos recuperamos.
No obstante, estos sacrificios al lado de los avances científicos que permitieron la fabricación de vacunas para hacerle frente a esa rara enfermedad, vienen demostrando su efectividad y sería absurdo que ante las evidencias se tengan resistencias a mínimas exigencias que van en la misma dirección de frenar la expansión de la pandemia.
En ese ámbito se ubica la reciente determinación del presidente Joe Biden, de los Estados Unidos, de que las empresas con más de 100 empleados garanticen que todos sus trabajadores tengan esquemas completos de vacunación contra la covid-19 o test semanales para identificar casos positivos de la enfermedad, así como el uso obligatorio de tapabocas. Aunque hay naturales opositores a la medida, no debe tenerse duda acerca de que ese es el camino correcto hasta erradicar por completo la amenaza.
En igual dirección, y siguiendo los pasos de Francia, por ejemplo, desde el próximo 16 de noviembre será obligatorio en Colombia presentar el carné de vacunación si se asiste a espectáculos públicos en estadios, teatros y otros eventos masivos como ferias, e incluso en los bares, casinos y los restaurantes. Es una medida sana con la que será posible mantener controlada la enfermedad y evitar la ocurrencia de un cuarto pico que pueda conducir a una nueva saturación de las unidades de cuidado intensivo y los posteriores fallecimientos de muchas de las personas que son atacadas por el coronavirus.
Hemos visto cómo en otras partes del mundo, como en Europa y Asia, hay nuevos brotes de la enfermedad que han obligado a retomar las restricciones. Para garantizar que podamos seguir avanzando hacia la normalización de las actividades, sin tener que retroceder en la reactivación social y económica, es necesario tomar las debidas precauciones. Ojalá pronto se pueda avanzar en subir los aforos de lugares públicos, para que la reactivación sea en serio.
En el caso colombiano, la medida de exigir el carné es acertada, aunque los riesgos de que haya manipulación de ese documento y hasta falsificaciones es real, por lo que se necesita mayor eficiencia en la posibilidad de generar los certificados electrónicos en el portal Mi Vacuna, y de esa manera evitar posibles fraudes, y tener información fiel acerca de los porcentajes de vacunación, los cuales deben alcanzar lo antes posibles el 70% de cobertura.

Ahora que se aproxima la temporada navideña, y que en el caso de Manizales está prevista la realización de la Feria Anual, un paso como este es fundamental en el camino hacia la normalidad, porque en la medida en que todos estemos vacunados será posible que los eventos tradicionales, como los conciertos y los desfiles se puedan realizar sin poner en riesgo la salud pública.