Tras contabilizarse ayer el 99,91% de los votos depositados por los colombianos en la segunda vuelta presidencial, se contabilizaron 22 millones 644.818 tarjetones, correspondientes a un 58,06% de participación, la más alta en muchos años, lo que parece demostrar que muchos sectores que antes no se habían expresado en las urnas lo hicieron esta vez.

El izquierdista Gustavo Petro, para quien fue fundamental su fórmula vicepresidencial, Francia Márquez, se convirtió en el nuevo presidente de los colombianos al alcanzar 11 millones 278.938 votos, correspondientes al 50,45%. Logró cerca de 2 millones 700 mil votos más que los alcanzados en la primera vuelta presidencial, que le resultaron suficientes, pese a no haber ganado en la mayor parte de los departamentos del centro del país.

Su contendor, Rodolfo Hernández, se quedó con 10 millones 571.757 votos (47,29%), cerca de 4 millones y medio más que en la primera vuelta, pese a los cuales no logró su objetivo de llegar a la Casa de Nariño. Al aceptar que ocupará la curul en el Senado de la República, que le entrega el Estatuto de Oposición, se espera de él un liderazgo importante como cabeza de la oposición al gobierno.

Del nuevo mandatario de los colombianos, que se convierte en el primer líder de la izquierda que llega a la Presidencia, se espera que el perfil amoroso y reconciliador con el que posicionó su candidatura se concrete en hechos palpables, que apunten a ponerle fin a la polarización y a los odios, y a tener una administración que sea positiva para el país, en la que se apunte a resolver problemas pendientes de solución, pero que también transmita tranquilidad a los inversionistas y a los empresarios, en general, de tal manera que la economía vaya por buen camino.

Los resultados en Caldas, si bien en los datos globales Hernández obtuvo el primer lugar, con 267.988 votos (56,95%), Petro alcanzó una votación nunca antes vista en la región por un aspirante izquierdista: 187.346 votos (39,81%), lo que se traduce en un triunfo innegable en la región de los lìderes políticos que lo acompañaron, como es el caso del senador electo Guido Echeverri Piedrahíta, y los representantes a la Cámara Wílder Escobar y Santiago Osorio, quienes se convertirán en los interlocutores de la región con el nuevo gobierno. Esperamos que esta nueva realidad política sea útil para Caldas.

Finalmente, hay que reconocer el trabajo serio y transparente de la Registraduría Nacional del Estado Civil y del Consejo Nacional Electoral, que no dejan ninguna duda en el proceso de preconteo en esta ocasión y que le dan tranquilidad al país acerca de unos resultados que merecieron la rápida reacción de Hernández reconociendo la derrota y el mensaje del presidente Iván Duque con su llamada al presidente electo a manifestarle que está listo para el empalme. Ganó la democracia y la institucionalidad.