Un caldense fue asesinado el fin de semana, a las 7:50 de la noche del pasado sábado.

Héctor Augusto Martínez Montoya, comerciante de 62 años, quien trabajaba con esfuerzo y humildad en su tienda del barrio San Roque, suroriente de Barranquilla, es la víctima de los violentos.

Natural de Aranzazu, Héctor despachaba pedidos en su negocio El Reposo, cuando un hombre con buzo negro entró al local y le disparó dos veces, según medios de la capital del Atlántico.

Uno de los tiros impactó su cuello y el otro su abdomen, contó Zona Cero.

El agresor huyó a pie mientras vecinos, conmocionados, intentaban salvarle la vida. Lo llevaron a la Clínica Centro, pero minutos después falleció.

La comunidad lo recuerda como un hombre amable, trabajador, siempre dispuesto a tender la mano. 

Intimidado

Según información preliminar de las autoridades, tanto su negocio como otro vecino venían siendo presionados por extorsionistas que operan en la zona. Se presume que los atacantes podrían haberse equivocado de víctima.

Héctor sí estaba pagando la llamada cuota mientras que el otro local, presuntamente, se había negado.

Documentos e información obtenida por medios locales revelan que a Héctor le exigieron $15 millones para poder abrir la tienda, además de pagos mensuales de $200 mil, que hacía por Nequi o eran cobrados directamente. 

Había denunciado la situación ante el Gaula, incluso entregando videos de cámaras de seguridad. Sin embargo, no hubo capturas, expresaron medios de esa ciudad.

Residía en el barrio Alfonso López.

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