Un adulto, de 89 años de edad, dijo desconocer que no se pueda tener una escopeta en su casa, como es tradicional en las áreas rurales.

Alguien les indicó a las autoridades que el señor guardaba un arma de este tipo dentro de su apartamento en Villamaría, por lo que se le hizo un allanamiento y le encontraron, el 10 de febrero del 2020, una escopeta calibre 16, apta para disparar, más tres cartuchos.

Por ese motivo empezó en su contra un proceso por porte ilegal de armas de fuego. A través de su abogado llegó a un preacuerdo con la Fiscalía, que le reconoció la pobreza extrema y la ignorancia, lo que rebajaría ostensiblemente su pena al aceptar cargos.

Esta semana, ante un juzgado de Manizales, se adelantó la verificación. La pena es de 18 meses, lo que le genera un antecedente judicial al adulto mayor, pero queda libre. El juez avaló el pacto.

La pena por este delito parte normalmente de 9 años.

Una persona puede hacer entrega voluntaria de un arma de fuego ante la Sijín y así evitar ser judicializada si le encuentran.

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