El influencer El Wilpro fue capturado en junio de este año, tras ser denunciado por inducir a menores en prácticas sexuales.

En los retos, los adolescentes debían girar sus cabezas según los días de la semana mencionados por él y si coincidían, se daban un beso, en caso contrario, debían darse bofetadas. Eso pasó en colegios de Medellín.

El juez de control de garantías revocó ayer la medida de presión domiciliaria del influencer, natural del Meta, quien gozaba de prisión domiciliaria. Sin embargo, la autoridad consideró inapropiada esta medida dada la gravedad de los delitos y ordenó su traslado inmediato a un centro penitenciario bajo la custodia del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario.

La decisión fue apelada por la fiscal y el delegado del Ministerio Público, dado que hay una prohibición expresa para otorgar dicha medida de aseguramiento de detención domiciliaria por el delito por el cual se procesa al señor y, en su lugar pidieron que se diera la de cárcel, explicó el juez, en respuesta a la apelación.

El Juzgado 12 basó su decisión en el artículo 199 de la Ley 1098 de 2006, en la que indica que en este tipo de delitos contra menores de edad no se pueden conceder medidas de casa por cárcel.

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