LA PATRIA | MANIZALES
Era muy sospechoso que el interno llevara un tarro de pintura. Por eso, los guardianes del Inpec en la cárcel La Blanca, de Manizales, decidieron seguirlo y se enteraron de sus planes delictivos: quería meter elementos al patio 5A del centro penitenciario.
El caso ocurrió en la tarde del miércoles. El hombre es uno de los 9 que pagan su pena en extramuros, es decir, se dedican a labores locativas o de la granja dentro de la misma cárcel.
El detenido, quien purga desde hace 3 años una condena de nueve por porte ilegal de armas de fuego, se aprovechó de este beneficio. La Policía Judicial de La Blanca cree que al tipo le lanzaron los objetos desde la carretera contigua que va para el centro penitenciario de mujeres Villa Josefina.
Dentro del tarro de pintura llevaba una media de futbolista y en ella 10 celulares, 4 baterías, 3 cargadores para móviles, un electrodo, 502 gramos de una sustancia blanca que dio negativo para estupefacientes, pero que se conoce como corte, usado para revolverle a la cocaína para que rinda. Además, 2 botellas que contenían un líquido viscoso (gotas de medicamento controlado Coquan).
Su idea era acercarse al muro del patio 5A y subir la mercancía a través de una cuerda que le tiraron desde las celdas del pabellón. Es decir, una especie de ascensor. Los guardianes notaron la anomalía cuando vieron que le lanzaron una cuerda.
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