La manera de caminar y los movimientos del ladrón salvaron a Jhon de ir a parar a la cárcel por el robo de una moto. En el juicio oral que se adelantó en su contra por hurto calificado, el testimonio de un morfólogo fue determinante para hallarlo inocente.

A eso se sumaron inconsistencias en el relato del padrastro del señalado, así como la falta de testigos, mencionados en audiencias pasadas que no acudieron a testificar, así como irregularidades en el allanamiento y captura.

Hacía un domicilio

Un hombre que trabajaba como domiciliario acudió al barrio San Sebastián, de Manizales, el 21 de agosto del 2023. Al llegar al sitio indicado, no dio con la dirección exacta, pero sí con un sujeto calvo de 1.70 metros, quien le dijo que el pedido era para él.

Acto seguido sacó un arma de fuego e intimidó a su víctima. Lo requisó y tras no encontrarle el celular, le robó la motocicleta, el casco y los documentos. El afectado acudió a la Policía, pero le pidieron no poner la denuncia, bajo el argumento de que estuviera pendiente de una exigencia de rescate o la pudiera recuperar.

Cuatro meses después y ante la falta de resultados, en medio de sus averiguaciones con otras personas y de publicar su caso en redes sociales, empezaron a compartirle fotografías de un sujeto que sería el ladrón. El propietario aseguró que efectivametne se trataba del delincuente y denunció el hecho.

En noviembre del 2024, con orden de allanamiento, detuvieron a Jhon como presunto responsable. Le imputaron cargos por hurto calificado, los negó y le otorgaron la detención domiciliaria.

El juicio oral terminó en mayo del 2025 y el Juzgado 12 Penal Municipal de Conocimiento de Manizales lo absolvió. Aunque la Fiscalía pidió una condena, los argumentos de la defensa fueron más fuertes y no se apeló.

La juez expuso que gracias a la exposición del morfólogo, se pudo determinar por medio de un video que grabó el hurto, que el señalado no tenía ninguna lesión o malformación que le provocara una cojera. Además se determinó que el ladrón parecía ser más joven.

Otra prueba a favor fue el saco que portaba el ladrón. En el allanamiento incautaron uno similar, pero un testigo demostró que se lo había regalado en el 2024, mientras los hechos fueron en el 2023.

El padrastro del hombre también habló y aseguró que encontró partes de una moto en su vivienda, y como se trataba de una persona que se ponía violenta y le cogió ventaja el consumo de estupefacientes, prefería verlo en la cárcel que muerto.

Tanto la defensa como la juez indicaron que el testimonio no fue creíble, teniendo en cuenta además que el señor recientemente pagó una condena en Perú por extorsión y estaba en medio de una pelea por la herencia que dejó la madre de Jhon.

Críticas a investigadores y Fiscalía

La defensa de Jhon mencionó que la Fiscalía no llevó a testificar a quienes identificaron al supuesto ladrón, criticó las demoras y lo que consideró como incompetencia de los investigadores de la Sijín, y todo obedeció a "chismes de barrio".

La juez puntualizó que ante los elementos incautados, faltó investigar más sobre su proveniencia, además de que no se tuvieron en cuenta pruebas como una foto y unas llaves del vehículo.

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