Madres buscadoras del Magdalena Medio, en compañía de Leo Ricardo García Sierra, quienes siguen en la búsqueda de sus hijos y esposos.

Foto | Freddy Arango | LA PATRIA

Madres buscadoras del Magdalena Medio, en compañía de Leo Ricardo García Sierra, quienes siguen en la búsqueda de sus hijos y esposos.

Hasta mañana se realiza en el Centro Cultural Rogelio Salmona, de Manizales, el Pacto Regional para la Búsqueda en Caldas, en donde se proponen estrategias para agilizar y mejorar las labores por las víctimas desaparecidas en este departamento.

Leo Ricardo García Sierra, secretario técnico del Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado en Caldas (Movice), explicó que el objetivo del encuentro es crear una agenda conjunta entre instituciones de búsqueda, organizaciones buscadoras, la sociedad civil y el Gobierno nacional para avanzar en los planes regionales.

"Se han exhumado cerca de 100 cuerpos en el Magdalena Medio y se ha hecho entrega diga de 11. Falta voluntad política de las administraciones locales para brindar más recursos a las entidades y a la Unidad de Búsqueda encargada de cumplir el mandato", sostuvo el activista.

Añadió que es necesario contar con ese apoyo de las alcaldías en temas logísticos, de capacidad humana y económica, dado que requiere del despliegue de gestiones, por lo que se hace vital buscar estrategias y alianzas.

 

Más apoyo estatal

Leidy Marcela Ramírez Hoyos, consejera de Derechos Humanos y Paz del Cridec, añadió que el encuentro se convierte en un espacio para escuchar las propuestas de la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas y del Movice para crear un plan que acoja a todo el Eje Cafetero.

"Somos realistas de que a las víctimas de desaparición forzada no las vamos a encontrar en nuestro territorio, en donde las vieron por última vez o donde tienen su arraigo", dijo Ramírez Hoyos.

Con referencia a Riosucio, cuya población indígena se vio fuertemente afectada, especificó que hubo quienes salieron como recolectores de café a Quindío, Antioquia o el oriente caldense, por lo que resaltó la importancia de que se unan las organizaciones del Eje para realizar una búsqueda más amplia.

Para ella, un avance en esta labor fue la creación de un equipo de la Unidad de Búsqueda para el Eje Cafetero, lo que ampliaría el radio de acción. Sumado a eso, destacó el compromiso del Gobierno nacional por acompañar un ejercicio que da tranquilidad a las familias.

 

El silencio, cómplice

Gloria Esperanza Giraldo lleva 23 años esperando saber qué ocurrió con su esposo, Salomón Díaz Fonseca, a quien desaparecieron, al parecer, miembros de las Autodefensas, el 30 de diciembre del 2001.

Él salió a laborar a una finca en el corregimiento de Isaza, en Victoria, y era habitual que todos los días la llamara, pero no lo volvió a hacer.

Cuando empezó a preguntar por él, una operaria de Telecom le dijo que lo habían subido a una camioneta y que ya sabía qué ocurría cuando eso pasaba.

Ahí conoció que algo malo ocurría. Nunca dejó de averiguar, aunque el silencio reinó entre los campesinos del sector.

Ella considera que pese a que las Auc se desmovilizaron, todavía se siente la presencia y eso evita que hablen. Solo supo que un sujeto contó que a Salomón lo mataron, sin conocer mayores pruebas.

Ella sueña con saber de él y que la hija conozca a qué lugar ir a dejarle flores. A las familias les dice que no pierdan la esperanza, que sigan buscando y no tengan miedo, porque siempre habrá alguien que les tienda la mano.

Como ejemplo pone a las mujeres buscadoras del Magdalena Medio, quienes la hacen sentir fuerte, no se siente sola.

"entre más hayan, más nos escuchan, más nos ayudan. Lo importante siempre es estar acompañados, que nos escuchen y vean el ejemplo en todo el mundo, porque en otros países también lo sufren", finalizó Gloria.

 

Continúa

Hoy, entre las 8:00 de la mañana y las 12:00 del mediodía continuará el encuentro con mesas de trabajo, un diálogo intersectorial y un acto público y simbólico.

 

En tres partes está dividida la búsqueda en el Eje Cafetero, todas incluyen a municipios caldenses.

Oriente de Caldas: Buscan a 1.328 desaparecidos.

Quindío y áreas metropolitanas del Eje: 1.583 desaparecidos.

Risaralda y occidente de Caldas: 1.135 desaparecidos.