Policía de Manizales alegra las noches al ritmo del violín en barrios y hospitales

DORIS MARCELA TÉLLEZ

LA PATRIA | MANIZALES

Los vecinos del Hospital de Caldas se asomaban nerviosos por sus ventanas al ver las patrullas de la Policía, mientras, de a uno, iba saliendo el personal médico a la puerta de Urgencias. “Hoy el aplauso es para ustedes, porque queremos agradecerles la labor que están haciendo”, comentó el intendente James Díaz, en micrófono.

La melodía de la canción La Gloria de Dios, en el violín del subintendente Yovany Díaz, hizo que enfermeros y médicas sacaran sus celulares para registrar el momento. El uniformado se acercó a la puerta del lugar y, convirtiéndose en uno con su instrumento, emocionó y hasta hizo bailar a las personas con su repertorio que pasó por el Aleluya y terminó con el reguetón Despacito.

Esta iniciativa de la Policía Metropolitana de Manizales y la Escuela de Carabineros Alejandro Gutiérrez busca llevarles alegría y tranquilidad al cuerpo médico y los manizaleños en época de cuarentena. “Hemos visto que la gente en vez de respaldar a los profesionales de la salud que están haciendo su labor, los agreden”, comentó el mayor Dorian Alexánder Valencia, subdirector de la Escuela.

La actividad también se realiza en los barrios de Manizales. El grupo se hace en un lugar donde las personas escuchan la música desde sus ventanas. La capitan Sandra Cardona, jefe del grupo de Prevención y Educación Ciudadana de la Metropolitana, cuenta que también hacen una obra de teatro para darles a conocer a las personas las recomendaciones para evitar contraer la covid-19.

Han visitado los barrios Villa Pilar, Villa Carmenza y San Sebastián, planean seguir con la actividad después de Semana Santa. Por su parte, la Policía de Caldas  también ha visitado los puestos de salud de los municipios del departamento y con aplausos y mensajes de aliento les rinden homenaje.

El violinista

Yovani Díaz Bedoya conoció el violín a los 12 años, tiempo en el que empezó a tocarlo en la Sinfónica Juvenil de Colombia (Bogotá). Pero antes de ello, aprendió a tocar guitarra y piano. Dijo que para tocar este instrumento melódico, primero se debe interpretar uno armónico.
Lleva ocho años en la Policía y también es enfermero de profesión. Su vida la lleva con sus tres pasiones: “Le propuse a los comandantes hacerles serenatas a las personas. Ellos me dijeron que sí y yo alisté mis pistas y mi repertorio”.
Díaz, que es caleño, también estuvo en la Orquesta Sinfónica de La Policía. Los fines de semana ameniza fiestas y matrimonios: “Creo que estamos viviendo un momento coyuntural, donde las personas que trabajamos para las comunidades debemos aportar ese granito de más para ayudar. Con mi arte busco que la gente se dé cuenta que hay esperanza y que la tarea de cuidarnos es de todos”, concluyó.