LA PATRIA|MANIZALES

En septiembre pasado, un juez envió a detención domiciliaria en el barrio Fátima, de Manizales, a un hombre señalado de tentativa de homicidio.

Ese día el procesado se comprometió a no salir de su casa sin permiso e informar si cambiaba de vivienda. Pero todo se le quedó en promesas.

La Fiscalía lo llevó este miércoles 26 de marzo a audiencia para solicitarle a un juez de control de garantías cambiar la detención de domiciliaria a intramural.

¿Qué ocurrió?

El Inpec le pasó dos informes al ente acusador en los que indicó que en un par de ocasiones los guardianes pasaron revista por el barrio Fátima y no encontraron al sindicado. En la primera, el 10 de febrero pasado, quien abrió la puerta indicó que el señor estaba en ICBF. Lo llamaron al número de celular, no contestó. Tampoco se conoció qué hacía allá, ni que tuviese autorización para acudir a ese sitio.

En la segunda, el 8 de marzo, tampoco estaba y no se conoció de permiso para ausentarse. Además, cambió de casa, hacia el barrio Betania, y no avisó. La juez avaló la petición de la fiscal y ordenó mandar al procesado a la cárcel de manera preventiva.

 El caso

Este sujeto fue detenido en la Invasión Samaria, el 8 de septiembre, señalado de apuñalar a un vecino, solo porque preguntó qué ocurría, cuando dos mujeres del sector discutían. Este hombre salió de su vivienda y atacó a la víctima. Puso en riesgo la vida del afectado, quien tuvo 55 días de incapacidad. Lo hirió en el cuello.