Comprar un vehículo representa una de las decisiones económicas más importantes e impactantes para una familia o individuo.

Reconociendo esto, la Autoferia se convierte en un espacio de orientación y educación para quienes desean dar ese paso con la mayor seguridad e información posible con el talento humano que allí estará guiando a los asistentes en su deseo de compra de vehículo.

Hay que tener en cuenta que, por ejemplo, para decidir cambiar de carro, se deben considerar que son bienes perecederos cuyo valor se ve afectado irrevocablemente por el paso del tiempo y el kilometraje.

Si se aplaza el cambio del carro de un año a otro, se puede estar perdiendo un 10% de su valor, se use o no. Sumado al costo inicial del estrene (matrícula), que es el 15% del valor, año tras año se deprecia alrededor del 10%.

Adicionalmente, hay factores económicos importantes como el peso frente al dólar, una variable crucial dado que la mayoría de los vehículos importados y se negocian en esta moneda.

Aunque este año el peso se ha revaluado, la respuesta en la rebaja de precios no es inmediata en los concesionarios porque los pedidos se hacen con meses de anticipación. Son datos que siempre se establecen por el talento humano de los concesionarios que buscan la mejor opción posible para una buena adquisición.

Con base en lo anterior, estrenar siempre será mejor. Por eso, presentamos las 9 recomendaciones que debe tener en ceunta a la hora de comprar carro nuevo.

Y lo puede hacer este fin de semana, del viernes 17 al domingo 19 de octubre en Expoferias, en donde se cumple la Autoferia de LA PATRIA con una muestra comercial que combina de manera inteligente las oportunidades de negocio, innovación tecnológica y entretenimiento de calidad, todo bajo el ideal de poder concretar el anhelo de estrenar vehículo.

Estas son las 9 recomendaciones para comprar carro nuevo

• Pensar en el entorno de uso: La decisión debe empezar por un análisis geográfico y de rutina. Si el usuario vive en Manizales y sale poco de la ciudad, necesita un vehículo compacto que tenga buena fuerza para las lomas, combinado con un bajo consumo de combustible. Para quienes consideran un eléctrico o híbrido enchufable, es imperativo verificar la infraestructura de carga eléctrica en la ciudad y la viabilidad de tener un cargador en la casa o el trabajo.

• Cerciorarse de la representación de la marca: Es fundamental elegir una marca con buena representación y respaldo en la ciudad o a nivel nacional. Esto garantiza que, cuando el vehículo requiera mantenimiento o repuestos, el usuario tenga acceso a talleres especializados y disponibilidad de partes sin tener que incurrir en largas esperas o costos logísticos elevados.

• Revisar las ofertas de financiación: Es crucial comparar las opciones de financiación que ofrece cada marca, entendiendo que ninguna presta dinero directamente, sino que lo hacen a través de bancos o instituciones financieras aliadas. El consumidor debe buscar que la cuota inicial sea manejable y que las cuotas mensuales estén dentro del flujo de caja de la familia, sin comprometer su estabilidad económica.

• Evitar créditos costosos y preferir tasas variables: Hay que estar pendiente de los créditos con condiciones onerosas. Una tasa fija puede no ser la mejor idea en un contexto con tendencia a la baja de las tasas de interés. Es más favorable adquirir créditos con tasa variable, para luego, en la medida que estas bajen, contactar a la financiera para renegociar las cuotas a la baja. Además, se deben preferir créditos que sean abiertos a los aportes a capital.

• Evaluar los seguros con lupa: Todas las pólizas ofrecen amparos básicos similares, pero los valores agregados y las coberturas específicas pueden variar. Se debe leer la letra menuda para saber qué aseguradora ofrece más beneficios. Es importante saber que el consumidor está en la libertad de escoger su seguro y que es obligatorio contar con una póliza de vida que cubra la deuda, para que, en caso de fallecimiento del titular, la obligación crediticia no recaiga sobre la familia.

• Fijarse en la depreciación del vehículo: La depreciación es un factor económico clave. Fasecolda, el gremio del sector asegurador, publica en su página web una tabla de valores de vehículos usados que permite consultar el precio de los modelos y cómo se deprecian en función del tiempo. Esta herramienta es invaluable para comparar marca a marca y modelo a modelo, siendo un elemento importante en la decisión final de compra.

• Definir el uso específico: La elección debe estar alineada con la función principal del vehículo. No es lo mismo un carro para uso familiar urbano, que uno destinado al transporte de ganado, que requeriría una camioneta de estacas. La necesidad define el tipo de vehículo.

• Seleccionar el tipo de transmisión adecuado: Dependiendo del terreno por el que se transite, se debe considerar una caja automática o manual. En una ciudad con topografía montañosa como Manizales, una transmisión automática ofrece mayor comodidad para subir lomas y manejar el embrague. Las cajas manuales tienden a desgastarse con más velocidad en este tipo de entornos.

• Prestar atención al consumo y costo de mantenimiento: El consumo de combustible es un gasto recurrente. Mientras que el diésel rinde más por galón y su precio suele ser menor, el costo de mantenimiento de los vehículos diésel y la mano de obra especializada son más elevados. Esto se debe a que los motores diésel son más robustos y sus sistemas requieren repuestos de mayor durabilidad y personal técnico más especializado. Por otro lado, los vehículos eléctricos eliminan por completo el gasto en combustible.

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