Las celebraciones en diciembre suelen ir acompañadas del uso de pirotecnia, lo cual representa una amenaza significativa para la salud mental y física de los animales domésticos.

Este fenómeno no solo afecta a los perros y gatos, sino también a la fauna silvestre, que puede sufrir el mismo tipo de estrés.

Por eso, es esencial establecer un espacio seguro donde los animales se sientan protegidos de los ruidos externos. Esta área debe estar aislada y equipada con elementos que favorezcan la seguridad y la tranquilidad del animal, como cortinas oscuras y mantas, además de insonorización.

Juan Martín García, médico veterinario egresado de la Universidad de Caldas y quien se dedica al área de medicina comportamental veterinaria en Mentes Animales, explica que existen dos poblaciones de animales de compañía: los que ya han mostrado conductas de miedo o incluso fobias a los ruidos de la pirotecnia y los jóvenes que aún no han desarrollado el problema, pero que pueden llegar a desarrollarlo.

"En ambos se pueden implementar unas pautas generales que tienen como objetivo minimizar la exposición a estos ruidos para evitar que experimenten emociones muy intensas y esto incluye pautas como crear una zona segura", comenta el veterinario.

Él detalla que una zona segura es un sitio dentro de la casa que estar aislado de ruidos fuertes.

"Ese lugar, que debe ser un cuarto de la casa en la medida lo posible insonorizado, debe estar cubierto con unas cortinas oscuras, tener una mesa con una camita y que esté cubierta por un mantel oscuro para que el perrito pueda esconderse en ese lugar, pero esta zona segura no puede ponerse los días que va a ocurrir principalmente la pirotecnia, sino que debe hacerse una hacerse una preparación previa".

De acuerdo con el experto, antes de que el animal ingrese a esta zona segura hay que lanzarle premios adentro y jugarle para que sea un espacio positivo y no sea el lugar al cual típicamente va que es debajo de una mesa de la casa o dentro del baño para esconderse.

Uso de feromonas

Las feromonas apaciguadoras son útiles para reducir la ansiedad y la implementación de ruidos suaves, como el piano clásico o ruido blanco, puede ayudar a minimizar el impacto de los estallidos.

"Nos sirven para aplicar en los sitios que vamos a a diseñar como zona segura. Es importante la medicación ansiolítica, que debe ir asesorada por un por un médico veterinario. También se recomienda utilizar ruidos como el piano clásico o uno que se llama ruido blanco con el fin de que la zona segura se pueda aislar".

García sostiene que hay que cubrir las necesidades de las mascotas, principalmente durante el día, porque las detonaciones de pólvora ocurren en la noche y ellos deben estar tranquilos cuando suceda. Incluye jugar con los animales.

Asesoría veterinaria

La asesoría veterinaria es clave porque aunque se tengan las pautas generales, los animales podrían presentar dificultades mayores necesitar una ayuda extra de un profesional. "Hay pacientes que tienen un miedo tan intenso que se convierte en fobia y en ese punto es en el que necesita de una asesoría porque la medicación debe estar muy bien asesorada porque va a depender de cada caso en particular".

El médico veterinario recuerda que la pólvora no solo impacta a los animales de compañía, sino también a la fauna silvestre que rodea la ciudad, incluyendo palomas y otras especies de aves, sarigüellas y otros mamíferos que experimentan las mismas emociones de miedo y de fobia que un perro o un gato y las consecuencias son negativas.

Adicional en los gatos

El enfoque de cuidado en los animales es proactivo y preventivo buscando evitar caer en el abordaje reactivo cuando las mascotas están nerviosas y sus dueños deben actuar. Las medidas son para anticiparse a afectaciones que causa la pirotecnia.

En los gatos es el mismo proceso, pero con la diferencia de que ellos no son tan abiertos a manifestar sus comportamientos. "El hecho de que no lo veamos muy abiertamente, no quiere decir que no esté experimentando estas emociones", indica García.

Y agrega: "Si en algún momento vemos que nuestro gato cuando escucha la detonación de la pirotecnia se escapa, se esconde o lo notamos salivando o con un cambio en el comportamiento, también debemos crear estas zonas seguras".

Para los gatos debe ser un sitio muy cerrado. A ellos les gustan las cajas o puede ser un guacal.

También hay feromonas apaciguadoras "y aunque no se reporta mucho en la literatura científica, hay gatos que pueden incluso llegar a necesitar medicación y principalmente para el 24 y 31 de diciembre y recordar que debe estar asesorado por un médico veterinario especializado".

Otras complicaciones

Las mascotas están expuestas no solo a la sensibilidad y a los ruidos que puedan sentir, sino también las consecuencias pueden ser a nivel de la fisiología del organismo, es decir, del funcionamiento.

A algunas puede afectarles la función del corazón, la presión arterial, incluso pueden sufrir por pasar por periodos de baja de defensas, que se conoce inmunosupresión.

"No solo es lo que podemos ver en términos de comportamiento, sino también en el interior, en el funcionamiento de su organismo. Esto cambia y si tenemos un perrito, por ejemplo, que ya tiene una patología cardíaca u otras patologías, esto puede incluso empeorar su cuadro clínico y requerir de una atención de urgencia".

Cuándo buscar ayuda profesional

En casos donde las medidas preventivas no sean suficientes, es fundamental consultar a un veterinario. Si los animales muestran signos extremos de miedo o fobia, la intervención profesional puede incluir medicación específica.

Es imprescindible mantener a las mascotas dentro de casa durante las festividades y evitar el uso de pirotecnia. La seguridad de los animales debe ser una prioridad en cada hogar, ya que su bienestar es fundamental en estas épocas festivas.

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