La celebración de los franceses por el gol de Theo Hernández a los cinco minutos del primer tiempo.

Fotos | EFE | LA PATRIA

La celebración de los franceses por el gol de Theo Hernández a los cinco minutos del primer tiempo.

Autor

LUIS MIGUEL PASCUAL

EFE | LA PATRIA | AL KHOR

Francia jugará la final del Mundial de Catar, la cuarta de su historia, la primera contra Argentina, tras haber logrado derribar el fortín marroquí con un gol de Theo Hernández a los 5 minutos y aguantar mal que bien el acoso africano hasta que llegó la puntilla de Randal Kolo-Mouani en el 79.

La alegría de la victoria lo puede todo. Catar presenciará el duelo entre Leo Messi y Kylian Mbappé, las dos estrellas del PSG, enemigos el próximo domingo con la tercera estrella para cada selección como recompensa.

No habrá finalista africano, como soñaba todo un continente, ni árabe, en el primer Mundial organizado en un país árabe. Tras caer ante la campeona del mundo, los "leones del Atlas", que han roto muchas barreras, tendrán que conformarse con buscar el podio el sábado contra la subcampeona, Croacia.

La victoria, que permitirá a Francia optar a revalidar el título conseguido hace cuatro años, algo que nadie ha hecho desde el Brasil de los 60, no puede ocultar las carencias defensivas de la campeona, puesta en jaque por un equipo que no destaca por su potencia ofensiva. Ni que su estrella, Kylian Mbappé, parece menos estrella desde hace dos partidos.

El tempranero gol de Theo cambió los papeles repartidos a priori, los franceses defendiendo y Marruecos a la ofensiva, como no se le había visto hasta ahora.

La mejor manera de derribar un fortín es obligarle a salir de sus casillas. En 5 minutos, Theo Hernández logró lo que no habían conseguido hasta ahora reputados equipos como Bélgica, Croacia, España o Portugal.

Como hace cuatro años en Rusia, la solución francesa llegó de la mano de un defensa. Entonces, ante Bélgica, fue Samuel Umtiti quien se vistió de goleador para dar a Francia el pase a la final y ahora fue Theo Hernández, un jugador que llegó como suplente y que fue propulsado a titular por la lesión de su hermano Lucas. Otra muestra de que el destino se escribe con renglones torcidos.

Como el gol, nacido de un desajuste defensivo de la zaga más sólida, un resbalón de En Yamiq, un mal despeje de Hakimi, un remate acrobático de Theo y Bono sin recursos. Todo lo que hasta ahora había rodado a la perfección para Marruecos se derribó en un instante frente al empuje francés. La confianza, que mueve montañas, dirán unos.

Lo más difícil ya estaba hecho para la campeona. El asediado obligado a salir de su fortín, el plan perfecto para el técnico galo, Didier Deschamps, que se había rebanado los sesos para fisurar la muralla y que se encontraba con una grieta al poco de empezar.

La final

Domingo

10:00 a.m. Argentina - Francia

Por el bronce

Sábado

10:00 a.m. Croacia - Marruecos

El presidente de Francia, Emmanuel Macron (derecha), festejó la clasificación de su selección por segunda vez consecutiva a una final del mundo. A su lado se puede ver aplaudiendo al presidente de la FIFA, Gianni Infantino. También, detrás de ellos aparece Ramón Jesurún, presidente de la Federación Colombiana de Fútbol.

Temas Destacados (etiquetas)