Manizales ha sido históricamente reconocida como una de las ciudades más limpias del país. Sin embargo, detrás de esta imagen se libra una batalla silenciosa, en la que el compromiso ciudadano y el esfuerzo logístico diario de la empresa de aseo Emas, son esenciales para sostener este reconocimiento.

El problema, según su gerente general, Juan Carlos Quintero Naranjo, radica en que unas pocas personas con malos hábitos pueden desencadenar grandes afectaciones para toda la comunidad.“Estamos hablando de una ciudad de unos 450.000 habitantes donde si el 1% no tiene un buen comportamiento, son 4.500 personas generando un problema”, afirmó Quintero.

Aunque Emas cumple con el 100% de rutas y frecuencias, según Quintero Naranjo, insiste en que sin cultura del aseo ningún servicio será suficiente. “Un pequeño porcentaje de personas con mal comportamiento puede generar un gran impacto”, subraya. Aún así la ciudad es ejemplo de limpieza, pero depende del compromiso ciudadano para mantenerse así.

Para contrarrestar el desánimo que sienten algunos trabajadores cuando los ciudadanos arrojan basura donde no deben, Emas adelanta capacitaciones y jornadas motivacionales. “Ellos saben que su labor impacta la salud y el medioambiente. Hacemos énfasis en atención al cliente y comunicación con la comunidad”, dice Quintero.

También enfrentan conductas agresivas: “Hay personas que tiran basura a los pies de los trabajadores”, afirma.

La acumulación de residuos no solo afecta la estética de la ciudad, sino también su salud pública, el medio ambiente y su reputación como destino turístico y referente nacional. Así se ve el Centro a una cuadra del Club Manizales.

Denuncias ciudadanas y puntos críticos

Uno de los principales lunares del servicio es cuando se saca la basura fuera del horario establecido. “Nosotros garantizamos la recolección en la puerta de la casa. No hay necesidad de poner la basura en separadores o parques”, insiste el gerente.

Sin embargo, los puntos críticos persisten en sectores como la ruta 30 y las reservas de Río Blanco y Monteleón que convirtieron en escombreras clandestinas, así como en barrios como el Nevado, La Francia, Palermo y la Sultana.

“Como se puede ver, la incultura no es un hecho exclusivo de barrios populares, incluso en zonas de alto estrato se ve mal comportamiento”, señala.

Para contrarrestar esos brotes de falta de civismo e incultura, Emas en alianza con la Alcaldía de Manizales, Policía y Secretaría del Medio Ambiente, ejecuta campañas pedagógicas. Recientemente realizaron una intensiva en el barrio Estrella, pero algunos comerciantes no cumplen. “Tuvimos que llegar a sanciones con la Alcaldía. No se puede socializar eternamente”, expresa Quintero.

Pese a la cobertura puerta a puerta de Emas, ciudadanos siguen sacando basura a deshoras, lo que genera puntos críticos. Este basurero afea el separador de la avenida Aquilino Villegas en el barrio Villa Pilar.

¿Qué hacen para limpiar la ciudad?

* Emas cuenta con 780 trabajadores, incluyendo personal operativo, administrativo y de gestión ambiental.

* Posee 62 vehículos, de los cuales 40 son carros compactadores.

* Presta el servicio de recolección puerta a puerta en toda Manizales, incluyendo zonas de difícil acceso.

* Opera bajo un modelo multimodal, con carros de distintas capacidades y canastos manuales en zonas escarpadas, escalas y caminos entre casas (21% de la ciudad).

Llegan refuerzos por temporada

Durante diciembre y las ferias de enero, Emas contrata 120 personas adicionales (temporales) para responder al aumento de residuos. “Es un reto grande, porque conseguir personal se ha vuelto difícil en la ciudad”, indica.

La planificación para esta temporada se inició con anticipación. El grueso del personal de apoyo entrará a finales de diciembre.

¿Se recicla lo suficiente en Manizales?

El gerente Quintero Naranjo reconoce que uno de los indicadores que quiere mejorar es el del aprovechamiento de residuos. “Solo el 7,96% de los residuos que gestionamos se aprovechan”, admite.

A diario, el relleno sanitario recibe 530 toneladas de residuos, de las cuales unas 400 toneladas provienen de Manizales. Los domingos baja a unas 80 toneladas. “Queremos incentivar la separación en la fuente y entregar el material directamente a los recuperadores de oficio”, agrega.

* Esta información es producto de la alianza entre el periódico LA PATRIA y el Canal Regional Telecafé.

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