El póker es un juego de apuestas en el que, con las cartas ocultas es posible hacer apuestas sobre una puja inicial. Ahora bien, la suma total de las apuestas recae en el jugador o jugadores con mejores naipes. 

Hoy en día, existen una gran cantidad de variantes. Entre ellos, el póker abierto, el póker cerrado, el póker de cartas compartidas y el póker surtido. Los más famosos son el póker tapado, el siete abierto, el Texas Hold’em, el póker 224. 

Para jugar al póker, es necesario tener una gran cantidad de aptitudes. ¿Cuáles son las habilidades necesarias? ¿Cómo impactan estas habilidades en los negocios?

Probabilidades

Ser un buen empresario o emprendedor no solo depende de la suerte. Es necesario comprender las probabilidades básicas y calcularlas a partir del contexto. Esto mismo sucede en el póker. Por ejemplo, si un jugador obtiene un flash drop en el flop, la oportunidad de recoger el color en el river tiene una probabilidad de 1 a 3. 

Algunos creen que en este juego es necesario atender los “outs”, es decir, las cartas que pueden mejorar su mano. Por eso, las probabilidades suelen ser muy importantes tanto en los juegos de azar, como en los negocios. Y en el poker con dinero real, calcular los porcentajes de probabilidad puede ayudar a obtener mejores resultados. 

Creatividad

El uso de la creatividad es fundamental para encontrar soluciones nuevas, ante las diversas dificultades que puedan surgir. El pensamiento creativo se activa de muchas maneras. Por ejemplo, el ajedrez suele ser uno de los juegos que mejora las áreas de la creatividad. El crecimiento en lo que respecta a la originalidad es verdaderamente significativo. El póker es una actividad que también requiere del uso de este tipo de capacidades cognitivas. 

Disciplina

Un profesional del póker no se conforma con tener suerte. Debe trabajar incansablemente, mantener la calma, y actuar en frío. Estas habilidades son muy útiles para cualquier persona que quiera emprender con su propio negocio. Además, quienes juegan póker suelen lograr adaptarse muy bien a los distintos estilos. Esto también es muy útil en el ámbito profesional. 
 

Cálculo de los riesgos y beneficios

Un gran jugador de póker sabe que no todo es el póker. Por eso, debe saber calcular exactamente cuánto es posible apostar según su capacidad financiera. El riesgo es bueno, pero en su justa medida. Esto dependerá del estilo de cada persona. Esto mismo sirve como habilidad para aprender a diversificar en los negocios, y elegir sabiamente en donde invertir dinero. Además, a la hora de elegir un proyecto, también es fundamental poner en la balanza todos los aspectos importantes y calcular cuáles son los riesgos y los beneficios. 

Comprender la psicología del juego

En el póker, es muy importante saber analizar a los rivales. Un buen jugador siempre tiene una gran capacidad de observación, ya que suele intentar adivinar las cartas de su oponente. En este sentido, cualquier buen empresario sabe que la competencia es algo real. Por eso, debe analizar las estrategias de márketing, la comunicación con el público, la oferta del producto, los precios. Además, debe pensar qué es aquello que lo distingue de los demás. Las respuestas, generalmente, suelen aparecer una vez que se analiza en profundidad al oponente. Estas estrategias se aprenden, a veces, jugando al póker. 

Mejorar la concentración

La habilidad para mantener la concentración durante un largo período de tiempo es crucial en el póker. A medida que pasa el tiempo, algunos jugadores pierden el foco y es ahí mismo cuando pueden llegar a perder oportunidades únicas. Los competidores profesionales son capaces de mantenerse absortos durante varias horas. 

Esta capacidad es totalmente trasladable a cualquier otra actividad. Para mejorar el rendimiento cognitivo, es necesario concentrarse. Por eso, el póker puede ayudar a desarrollar esta práctica. 

Capacidad para planificar

La corteza prefrontal es el área del cerebro donde se desarrolla la capacidad para planificar y anticiparse a los acontecimientos. Es muy útil también para el autocontrol y para el uso del buen juicio. De este modo, al ejercitarse, es probable que las habilidades para tomar decisiones mejoren, independientemente de la actividad. Lo fundamental es la planificación y el orden de los pasos a seguir durante un largo período de tiempo. De hecho, los emprendedores conocen esto como modelo de sostenibilidad, un negocio con una curva progresiva y ascendente.  

Mejorar la memoria

Tener memoria es imprescindible para realizar una gran cantidad de actividades con eficiencia. Muchas veces, recordar exactamente números, contratos o charlas puede ayudarnos a realizar la actividad diaria con mayor fluidez. Y sobre todo, sirve para tomar decisiones. 

En este sentido, el póker es muy útil para poner en práctica esta capacidad. Generalmente, para jugar como un profesional es necesario interpretar variables a partir de lo que se recuerda. Los jugadores intentan recordar los movimientos pasados de los contrincantes, y en base a eso, tomar decisiones en beneficio del propio juego. 

En conclusión, hay una gran cantidad de habilidades que se pueden mejorar al jugar al póker. Todas ellas brindan la posibilidad de ponerlas en práctica en el ámbito de los negocios o en la vida cotidiana.