LA PATRIA | MANIZALES

Padre de familia, no olvide esto: un alto porcentaje de los delitos sexuales contra menores ocurre en los entornos más próximos a ellos, como sus hogares, sus barrios, sus colegios y otros lugares que normalmente frecuentan.

"Peor aún, la mayoría de los actos de violencia sexual son cometidos por personas muy cercanas a ellos, incluso de su misma familia. Hay estadísticas que demuestran que muchos de los abusadores son los padrastros, los abuelos, los tíos, los primos, los padrinos, los hermanos, e incluso, los mismos padres. No obstante, también pueden ser profesores, vecinos, entrenadores, cuidadores o personas que tienen un contacto constante los niños”, advirtió ICBF.

Caso

La mamá de una menor, de 12 años, le contó a LA PATRIA que la adolescente habría sido víctima de vejámenes sexuales, dentro de una alcaldía del occidente caldense, a manos del inspector del trabajo de esa población, amigo suyo y vecino de oficina. La audiencia donde lo acusarían era el jueves, pero se reprogramó para el 11 de julio. Ella contó su historia.

• *"Los hechos son del 10 de junio pasado. La niña va a catecismo los sábados y ese día salió a las 12:20 de la tarde, me llamó y me dijo que si podía ir a saludarme a la Alcaldía, como acostumbra. Allá la quieren mucho, por sociable. Fue, me contó que tenía hambre y le di $3 mil para un helado, mientras salíamos".
• -"Le pedí que llevara un documento a ventanilla, en el primer piso, aprovechando que iba de salida. Lo hizo, se devolvió y me contó: Mamá, cómo le parece que pasando por la Oficina del Trabajo, el señor de ahí me regaló $10 mil". No lo vi raro, pues él ha sido cercano".
• -"La niña salió a las 12:40 de la Alcaldía para la casa y antes de las 2:00 de la tarde me llamó y me contó que estaba en la vivienda. Me fui para allá al salir de trabajar y la encontré tirada en la cama, llorando. Me expresó que me iba a contar algo, así la regañara, pero que debía hacerlo".
• -"Narró que cuando iba de salida, el de la Oficina del Trabajo la llamó y le preguntó que para dónde se dirigía. Le pidió que entrara y la puso a hacer unas firmas, de muestra de una de él. Se llegó la 1:00 de la tarde y el secretario de esa dependencia se despidió y se marchó, pero el titular se quedó con mi niña y cerró las cortinas y las ventanas. No la dejó salir y le echó doble seguro a la puerta. Le pidió que siguiera firmando. Le grabó su número en el celular de ella y le indicó que cuando estuviese en piscina con amigas lo llamara para avisarle".
• -"Sacó un fajo de billetes y le iba a dar $55 mil, la niña insistió en quería irse, pero no la dejaba. Le pidió que se tranquilizara, que cerrara los ojos, se sentó al lado de ella y le pasó la mano por diferentes partes del cuerpo. Mi hija dice que le hablaba muy suave e intentó darle un beso. Ella se paró a abrir la puerta y la sujetó fuerte de la cintura, de esos moretones la Fiscalía tiene fotos. Pudo salir, no volvió a mi oficina, sino que se dirigió a la casa".
• -"Tenemos mucha incertidumbre, un funcionario público, allegado, dentro de una Alcaldía, son muchas cosas, pero decidimos denunciar, porque esto no puede quedar así".

Cuidado

De acuerdo con un profesional especializado forense de Medicina Legal, un pedófilo puede ser una persona de cualquier edad, sexo, condición social o económica, nivel educativo, profesión, raza, religión, condición física o cognitiva. Existen algunas conductas del sujeto que pueden levantar sospecha y a las que se debe prestar atención como por ejemplo:

• *La insistencia por permanecer a solas con el o la menor. Inventa cualquier excusa para lograrlo.
• *La preferencia por socializar con menores de edad por encima de los adultos.
• *Las muestras exageradas de cariño o de afecto en forma injustificada e inoportuna.

La confianza

Que la mayoría de los casos de abuso sexual con menores ocurran en sus entornos más cercanos tiene un común denominador: la confianza. Precisamente, por eso, suele ser tan difícil identificar a tiempo una situación de riesgo.

El objetivo del agresor es generar una atmósfera en la que sus intensiones pasen desapercibidas y logren ganar espacios de privacidad donde, finalmente, puedan quedarse a solas con el menor de edad.

"Los agresores siempre buscan ganarse la confianza, intentan ser muy cercanos, se inventan actividades lúdicas y recreativas con el propósito de compartir mucho tiempo con su víctima; tienden a ser muy cariñosos y suelen dar regalos sin motivo alguno. También se valen de guardar secretos o de darles dinero como una forma sutil de manipularlos y extorsionarlos", contó ICBF.