Mauricio Alarcón

Foto | Tomada del X @aiarconsalvador | LA PATRIA

Mauricio Alarcón es abogado y dirige la FCD, que es una organización de la sociedad civil ecuatoriana que promueve y defiende el estado de derecho, los principios democráticos y las libertades individuales.

LA PATRIA | MANIZALES

La política ecuatoriana gira en un círculo vicioso, otros dirán que es un déjà vu, detrás de los dos candidatos que aspiran a llegar al Palacio de Carondelet están dos viejos adversarios que han luchado por el poder en el vecino país.

El magnate Álvaro Noboa es el padre de Daniel Noboa, que con 35 años puede convertirse en el presidente más joven de Ecuador; mientras que detrás de su adversaria, Luisa González, que puede ser la primera mujer en ganar unas elecciones presidenciales, está Rafael Correa, quien derrotó a Noboa, padre, en la segunda vuelta presidencial del 2006, lo que evidencia ese circulo vicioso en el que vuelven a caer los ecuatorianos, de elegir entre el correísmo y el anticorreísmo, es decir entre el movimiento Revolución Ciudadana (de Correa) o Acción Democrática Nacional (ADN), un grupo formado por Daniel Noboa y su familia, de carácter neoliberal.

La diferencia en esta ocasión es que Ecuador acude hoy a las urnas en medio de la peor crisis de seguridad de su historia, incluyendo el crimen del candidato presidencial Fernando Villavicencio, ocurrido el 9 de agosto, en el que estaban involucrados seis colombianos que fueron asesinados la semana pasada en una cárcel de Guayaquil.

LA PATRIA conversó con Mauricio Alarcón Salvador, director ejecutivo de la Fundación Ciudadanía y Desarrollo (FCD), sobre los comicios de hoy.

A pesar de que González y Noboa disputan una elección de periodo recortado, ¿por qué son tan trascendentales estos comicios para el futuro de Ecuador?

Efectivamente es una elección para un período extraordinario corto, que es lo que resta del mandato original de Guillermo Lasso, en estricto sentido son 18 meses, considerando que el presidente o presidenta entrará en funciones en diciembre y permanecerá en ellas hasta mayo del 2025. Es vital esta elección porque es un peldaño para el acceso a un cuatrienio completo, es un periodo de gobierno que además no se cuenta como una elección o como una reelección, sino que empieza desde cero y sobre todo es una suerte de periodo de gracia para mostrarle al país algún resultado.

¿Y qué resultados esperan los ecuatorianos en solo 18 meses de gestión?

Ante el fracaso de Guillermo Lasso este gobierno transitorio interino tiene la oportunidad de mostrarle al país que más que tiempo con voluntad política y con decisión se puede lograr algo en beneficio de todos, respecto a inseguridad, crisis económica, lucha contra la corrupción.

¿Esta elección es una réplica de los comicios presidenciales de 2006, cuando el magnate Álvaro Noboa se enfrentó a Rafael Correa o dista mucho de esa elección que ganó Correa?

No me animaría a decir que la elección es una réplica de la del 2006 por el simple hecho de tener al correísmo y al noboísmo enfrentados. Dista mucho de la que ganó Correa por las condiciones de esa elección presidencial. Hablamos de una crisis de inestabilidad de varios presidentes en muy pocos años, de una situación económica difícil en los primeros años de dolarización. Hoy, en cambio, se tienen fuerzas políticas o nombres parecidos, pero en condiciones distintas.

Pero detrás de los dos candidatos están los mismos personajes de los comicios del 2006. ¿No es un círculo vicioso?

Si queremos pensar o decir que hay un círculo vicioso en la política nacional, este hace su presencia cada que hay elecciones. En cada elección se repite entre los grupos de poder que no quieren perderlo, que quieren mantenerse a toda costa. Únicamente podría desaparecer cuando se haga política en serio, cuando las organizaciones políticas hagan bien su trabajo, representen a las bases, elijan a sus candidatos en procesos democráticos internos, dejen de venderse a quien ofrezca recursos económicos o rentarse a quien esté dispuesto a pagar un precio. Así es la situación de la política nacional, negativa, corrupta, difícil, problemática, nace y muere en los partidos políticos.