Tengo un tío deportista que desde hace varios meses me lanzó un vaticinio: “Ojo con los Juegos Nacionales, porque acá pueden salir con un chorro de babas como el de Ibagué, y para disimular la cosa terminan alquilando Expoferias por unos días y nos quedamos sin escenarios deportivos nuevos”.
Con lo visto esta semana, creo que mi tío puede tener razón, al menos en estar preocupado.
A los que entran en sintonía los pongo al tanto: el 5 de junio de 2019 el presidente Iván Duque anunció que el Eje Cafetero sería sede de los XXII Juegos Deportivos Nacionales y VI Paranacionales, que reunirán a más de 9.000 deportistas en 35 disciplinas del 11 al 23 de noviembre de 2023. Éstos serán los primeros juegos organizados por el nuevo Ministerio del Deporte, que tiene el reto de mostrar en qué consiste la diferencia entre hacer unos Juegos con Ministerio y hacerlos con Coldeportes, y además debe eliminar la desconfianza que quedó después del fracaso de los Juegos 2015 de Ibagué, en donde la Contraloría concluyó que hubo un desfalco de $62.000 millones y obras inclusas y abandonadas.
Ser sede de los Juegos Nacionales ilusionó a los deportistas locales porque salvo el Estadio Palogrande los demás escenarios suelen recibir nulos mantenimientos y mejoras locativas, y la gracia de alojar una competencia de esta envergadura es la infraestructura que queda para las ligas. En 1988 fueron los últimos Juegos Nacionales que se hicieron en Caldas, y de esa fecha es la última reforma significativa de escenarios deportivos. Eso lo padecen quienes hoy practican esgrima, taekwondo, ajedrez, tenis de mesa, pesas y gimnasia, entre otros.
Faltan 13 meses para que empiecen los Juegos, pero acá están dedicados al peloteo: que la culpa la tiene la Gobernación, dicen en la Alcaldía, y del mismo modo pero en sentido contrario replican desde el Departamento. ¿La culpa de qué? de estar con el tiempo a ras para construir el complejo deportivo que le debe quedar a Manizales con estos Juegos. Para entregar a tiempo tendrían que construir a contrarreloj.
Primero proyectaron una megaobra entre el Coliseo Mayor y el Menor, hasta las canchas de tenis, pero luego concluyeron que como ese enorme proyecto de $64.000 millones no quedó incluido en Planeación Nacional era necesario redimensionarlo para pagarlo desde acá. El ajuste es un nuevo coliseo multipropósito en la Baja Suiza, que cuesta $20.000 millones, de los cuales la Alcaldía pone la mitad y la Gobernación la otra mitad. Como la obra tiene un plazo de ejecución de 10 meses, los Juegos comienzan el 11 de noviembre del año entrante y ya estamos en octubre, la contratación tendría que adjudicarse ya pero no se ha podido. El Departamento dice que tiene la plata lista, con recursos de regalías, pero la Alcaldía aún no entrega todos los requisitos técnicos y legales necesarios para iniciar la construcción.
Los que ven el vaso medio lleno dicen que el nuevo Centro Internacional de Aguas Abiertas que la Gobernación construye en Chinchiná, así como las remodelaciones que el Departamento está haciendo en el Bosque Popular avanzan bien. En cuanto a las tareas de la Alcaldía, también avanza la remodelación del Coliseo Menor, así como la del Mayor, que se ejecuta con recursos del Ministerio del Deporte. Para el patinódromo del Bosque Popular, la administración de Octavio Cardona dejó $10.000 millones presupuestados para concluir la obra, pero como en 2020 no se ejecutaron fue necesario regresar esos dineros a recursos del balance. Hace tres semanas publicaron los pliegos por $6.850 millones para obras complementarias para las pistas de ruta y velocidad.
En cuanto a las otras sedes: a Pereira ya le dijeron que el Velódromo Alfonso Sarria necesita tantas inversiones que las competencias de ciclismo de los Juegos Nacionales se realizarán en Cali, y en Armenia el complejo acuático nada que sale a flote. Se necesita que los responsables de las obras se contagien de la velocidad y el alto rendimiento de los deportistas para quedarle bien al país y, sobre todo, a las nuevas generaciones locales que necesitan infraestructura óptima para entrenar.