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LA PATRIA | MANIZALES

Una serie de contradicciones en las declaraciones de la supuesta víctima y de un testigo presencial de los hechos no le permitieron a un juzgado de Manizales y al Tribunal Superior de la ciudad darle la razón a la Fiscalía en un caso de lesiones personales dolosas.

El acusador llevó a estrado a un hombre, señalado de generarle heridas a otro, el 7 de febrero del 2016, en el sector de El Plan, en el barrio Minitas, afuera del establecimiento Buchanans, durante una riña.

Según el denunciante, que tuvo 55 días de incapacidad por estos hechos, entre la 1:30 y 2:00 de la madrugada el administrador del negocio se negó a entregarle un morral que le dio a guardar mientras tomaba licor en ese lugar. 

Al parecer, la situación desencadenó en una riña en la que la víctima terminó afectado en un ojo por un botellazo.

"Al rato me lo entregó cuando iba a cerrar, seguimos discutiendo y como yo estaba pasado un poco en el licor, le mandé un manazo y lo empujé y en ese momento me tiró un poco de gente con cuchillos y navajas. Cuando lo miré me tiró una botella, me estalló en la cara y empecé a soltar mucha sangre del ojo. Corrí hacia Carabineros y una patrulla me recogió y me llevó al hospital", declaró.

Contradicciones 

En las decisiones de primera y segunda instancia las dudas favorecieron al procesado. Se explicó que hubo contradicciones en las declaraciones de víctima y testigo que no permiten derruir la presunción de inocencia del procesado. Por ejemplo, en la minuta del CAI La Sultana reposa que el afectado dijo no reconocer a su agresor.

Otras tienen que ver con la hora de los hechos, el lugar de la discusión. Se indicó que en el lugar no se guardaban pertenencias para evitar problemas con borrachos, que al afectado lo sacaron varias veces del bar por problemático. Las dudas favorecieron al señalado, que terminó absuelto. 

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