Otra vez la tribuna virulenta, como es costumbre, reprobando y pidiendo la cabeza de los directivos y los técnicos.

Dayro respondió con altura, en reunión privada en la que reafirmó su compromiso con el Once, con los entrenadores y consigo mismo.

Algunos de los futbolistas, por sus escasas condiciones, no jugarían ni en el barrio, ni con rodillones.

El Once Caldas no logra consistencia en su juego, ni regularidad en su rendimiento, a pesar del trabajo de los técnicos.

Días felices en la victoria celebrada por lo influyente, para redimir la irregular campaña, que no encuentra continuidad en los buenos...

De fútbol opinan todos, hablamos muchos, pero de análisis, poco.

No se avanza en línea recta hacia la cumbre, después de los pasajes de zozobra. Siempre habrá tropiezos.

Aunque el plan de juego fue bien diseñado, fallaron algunos intérpretes. Con Lemus se jugó con diez. Con Riquet, con nueve. Con...